Posibles causas
Seis minutos antes de aterrizar, salirse de pista y estallar al chocar contra un muro, el vuelo 7C2216, un Boeing 737-800, recibió de la torre de control del aeropuerto de Muan (290 kilómetros al suroeste de Seúl) una alerta de riesgo aviario, que se emite cuando se detecta una gran bandada de pájaros o aves de gran tamaño en torno a la trayectoria del avión.
Dos minutos después, el capitán emitió un mayday o alerta de socorro antes de aterrizar sin desplegar el tren de aterrizaje ni aparentemente otros mecanismos de frenado, como los spoilers (las placas móviles situadas en la parte superior de las alas que aumentan la resistencia al aire) o el empuje inverso de los motores (que desvía la dirección del escape y reduce la aceleración).
Los expertos consideran no obstante que el fallo en un motor (imágenes captadas antes de aterrizar muestran llamas en el propulsor derecho, posiblemente por el impacto con un ave) no debería haber afectado a los otros sistemas y que será necesario dilucidar si además del supuesto choque, pudo haber también algún defecto en la aeronave o en el mantenimiento de la misma.
Se espera que la investigación se demore lo menos seis meses y que pueda llegar a durar años, sobre todo tras conocerse que una de las dos cajas negras, la grabadora de datos de vuelo (FDR), resultó parcialmente dañada y decodificarla llevará más tiempo.
El avión, los pilotos y la pista
El diario The New York Times, citando a la consultora Cirium, detalló que el Boeing 737-800 accidentado pertenecía a la irlandesa Ryanair, que alquilaba la aeronave a la compañía de bajo coste surcoreana Jeju Air desde 2017 y que el aparato tiene en torno a 15 años de antigüedad.
El capitán del vuelo, de 45 años, acumulaba 6.823 horas de vuelo, mientras que su copiloto, de 35, sumaba 1.650.
La mayor parte de esa experiencia correspondía además al 737-800, ya que el piloto sumaba 6.096 horas de vuelo con el modelo y su segundo de abordo 1.339.
Algunos han apuntado a que 300 metros de pista de Muan estaban en obras por una futura ampliación, dejando 2.500 metros para aterrizar.
Funcionarios del Ministerio de Transporte surcoreano citados por la agencia Yonhap indicaron en todo caso que el modelo siniestrado es capaz de aterrizar sin problema en pistas de solo 1.500 metros de longitud.
Las víctimas
Las características del vuelo, principalmente reservado a través de agencias de viaje, ha supuesto que familias enteras se encontraran a bordo en una temporada muy popular para viajar en Corea del Sur, cuando coinciden el breve parón vacacional de final de año y el intenso frío invernal y muchos apuestan por ir a destinos cálidos del sureste asiático.
Entre las muchas familias que viajaban en el avión se contaban, por ejemplo, nueve personas de cuatro generaciones distintas de un solo clan que viajó a Bangkok, desde donde partió el vuelo, para celebrar el cumpleaños del pasajero de mayor edad del 7C2216, un hombre de 78 años.
Medios locales hablan también de grupos de colegas ya jubilados volando en el Boeing, donde la mayor parte de los viajeros estaban entre los 40 y los 60 años, aunque entre las víctimas se cuentan cinco menores de 10 y otros nueve que no llegaron a cumplir los 20.
El aeropuerto de Muan, capital de la provincia de Jeolla del Sur, una de las más rurales del país, es empleado casi de manera exclusiva por los habitantes de la región, donde parecía residir casi la totalidad del pasaje.
Familiares que esperaban la llegada de sus allegados han explicado a medios surcoreanos que recibieron mensajes instantáneos de sus seres queridos, algunos incluso bromeando, indicando que la tripulación les había informado de un problema en el avión debido al choque con un ave.
Los supervivientes
Solo dos personas sobrevivieron al choque, ambas auxiliares de vuelo que viajaban en la cola del avión, la cual fue aparentemente la parte menos afectada por el aterrizaje, el choque y la explosión.
Uno de los supervivientes, un varón de 33 años apellidado Lee, se encuentra ingresado en la unidad de cuidados intensivos de un hospital de Seúl con varias fracturas (una de ellas en el hombro izquierdo) y pronóstico reservado, aunque se encuentra consciente y aparentemente no sufre ninguna pérdida de memoria.
La otra es una mujer de 25 años apellidada Koo y también ha sido trasladada a un centro médico de la capital surcoreana.
La auxiliar de vuelo ha sufrido heridas en la cabeza y en un tobillo y se cree que está estable y, según los bomberos que la rescataron, les relató que "empezó a salir humo de uno de los motores y luego explotó".
8 comentarios
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elcomentadorNo son luces, son un sistema de guiado por radio para el aterrizaje y que sobre todo es muy útil cuando no hay visibilidad porque permite un aterrizaje automático. El ILS va marcando al piloto si el avión está siguiendo la rampa correcta de descenso y si va alineado con el centro de la pista de aterrizaje o no. En todas las pistas se puede aterrizar en ambos sentidos y el sentido de aterrizaje lo marca normalmente la dirección y fuerza del viento. Lo que es raro en este caso es que las antenas del ILS estuvieran montadas sobre un talud que supuso un obstáculo mortal para los pasajeros de ese avión... normalmente el avión habría arrasado con las antenas sin sufrir muchos daños y se habría arrastrado por fuera pista hasta detenerse, probablemente habría muerto mucha menos gente aunque eso es imposible de saber.
ToniForeverEl avión más vendido y más utilizado cada día en el mundo es el Boeing 737 en sus diferentes variantes y en el que es seguro que has volado muchas veces Este accidente no es achacable al modelo de avión, parece que el motor derecho se trago unos pájaros y que los pilotos no supieron gestionar la emergencia, podría haber pasado en cualquier otro modelo de avión.
No me subo a un Boeing ni con el billete regalado.
Interventoren este caso, esas luces estan en aproximacion. vamos cuando aterizan. nadie sabe porque este vuelo aterizo alreves
En cualquier caso volar sigue siendo el medio de transporte mas seguro por un margen muy amplio y aumentando. Hoy en el mundo ya hay mas de 120.000 vuelos comerciales al día, de lo que podría deducirse que cada hora están volando unos 5000 aviones. Sin embargo, como la mayoría de vuelos tienen una larga duración, la realidad es que este número es mucho más alto. En proporción al total los accidentes cada vez son mas casuales. Con este dato resulta igualmente sorprendente que tanta gente no crea en el cambio climático inducido por la actividad humana ya que cada uno de esos aviones es extremadamente eficaz repartiendo CO2 a lo largo y ancho de la atmósfera.
No subais en Boeing 737-800
No, los expertos están achacando el terrible desenlace a dos cosas: - El poco tiempo que se dieron los pilotos para preparar el segundo intento de aterrizaje y que probablemente les habéis permitido sacar flaps, slats y tren de aterrizaje - El monticulo elevado que se encontraba al final de la pista de aterrizaje dónde se ubican las antenas del ILS (sistema de ayuda al aterrizaje) y que normalmente se ponen sobre una superficie plana y son colapsables sin dañar el avión en caso de que se salga de pista El poco tiempo entre el primer y el segundo intento de aterrizaje impidió a los pilotos repasar las "checklist" y preparar los sistemas adecuadamente. Los sistemas hidráulicos parecían estar funcionando porque el avión hizo un descenso perfectamente controlado pero no desplegaron ni flaps ni tren de aterrizaje por lo que aterrizaron demasiado rápido y sin sistemas de freno disponibles. Aparte, el tren de aterrizaje se puede desplegar de manera mecánica sin necesidad de hidráulica, pero para ello hay que ejecutar unas acciones en cabina que parece que se saltaron. De todos modos...hasta la investigación e informe final todo son especulaciones.
La causa real del desastre fue un muro que soportaba el sistema de luces ALS de aterrizaje y que no debería estar donde estaba. Los sistemas de ALS se instalan con simples postes, no sobre muros de hormigón.