Las parejas del mismo sexo podrán casarse a partir de ahora en Inglaterra y Gales tras la adopción de una legislación que ha contado con el apoyo de los principales partidos y que se suma a la promulgada por Escocia el pasado mes de febrero.
El primer ministro, David Cameron, se felicitó por la ley en un artículo escrito para la web de temática LGBT Pink News. «Este fin de semana es un momento importante para nuestro país. Es un momento por el que recordamos que somos un país que seguirá honrando sus orgullosas tradiciones de respeto, tolerancia y valor igualitario».
El liberaldemócrata y socio de Gobierno, Nick Clegg, también aplaudió la legislación que convertirá a Reino Unido «en un lugar diferente» y felicitó a su partido por participar. «Si al final hemos entrado en coalición solo para conseguir esto, para mí habrá valido la pena», declaró en comentarios recogidos por la cadena BBC.
El líder laborista, Ed Miliband, también se sumó a las felicitaciones en un momento «increíblemente feliz para las parejas gays» y «un día de orgullo para el país», al tiempo que advirtió de que «la batalla por la igualdad todavía no ha terminado».
Los primeros matrimonios comenzaron a celebrarse nada más pasar la medianoche en presencia de reconocidos activistas proderechos humanos como Peter Tatchell, quien hizo de testigo en la boda entre Peter McGraith y David Cabreza, que unieron lazos tras 17 años de convivencia.
Por su parte, el arzobispo de Canterbury, Justin Welby, aceptó la nueva legislación y reiteró que la Iglesia se plegará a las decisiones del Parlamento. «La ley ha cambiado y aceptamos la situación», declaró a la cadena británica.
3 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Enhorabona a aquestes parelles i a tot el colectiu Gay que lluita pel just reconeixement dels seus drets. I ni punyetero càs als que s´oposen als drets dels damés, perque molts d´aquests també justifiquen amb mentides, la violència de gènere.
YA sabemos lo que no tenemos que copiar de esa sociedad, aunque nosotros vamos por delante que orgullo.