Ronaldo y Curro Torres, en un lance del partido. Foto: DESMOND BOYLAN

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Valencia 2
Real Madrid 0

VALENCIA: Cañizares (*), Curro Torres (**), D.Navarro (**), Marchena (**), Carboni (**); Albelda (**), Baraja (**); Jorge López (**), Aimar (**), Vicente (**) y Mista (**).
Cambios: Oliveira (**) por Aimar, Rufete (*)por Mista, Sissoko (*) por Albelda.

REAL MADRID: Casillas (*), Míchel Salgado (*), Pavón (*), Raúl Bravo (-), Roberto Carlos (-); Figo (*), Cambiasso (*), Beckham (*), Zidane (*); Guti (*) y Ronaldo (-).
Cambios: Portillo (*) por Guti

Àrbitro: Moreno Delgado (Colegio catalán). Amonestó a Vicente, Míchel Salgado, D.Navarro y Jorge López.

Goles:
1-0, minuto 4, Mista.
2-0, minuto 71, Oliveira.

Agencias|VALENCIA

El Valencia le metió ritmo al partido desde el pitido inicial y buscó siempre la referencia de Aimar para construir su juego. Aprovechando la locura inicial de un enemigo espeso y con su defensa agujereada, los de Rafa Benítez marcaron su territorio y cercaron el marco de Casillas. El propio Aimar lanzó su primera advertencia con el público de Mestalla tomando todavía posiciones (minuto 3) y esa amenaza trastocó al Madrid, que apenas un minuto más tarde recibía el primer manotazo. El genial media punta argentino halló un espacio en la derecha donde recibió Jorge López y éste, libre de marca, se la entregó a Mista para que rematara a la red el primer balón que tocaba en ataque. Los blancos sufrían en defensa y los locales pisaban el acelerador para matar cuanto antes el partido.

Los minutos posteriores reflejaron la misma tónica y el cuadro valencianista mantuvo el listón. La zaga blanca encendía las luces de alarma en su intento de venirse arriba, aunque Aimar fue víctima de una inoportuna lesión que le apartó del encuentro en apenas veinte minutos. En su puesto salió Oliveira, que por ganas y empuje dejó un buen sabor de boca entre la parroquia ché. En el bando dirigido por Queiroz, sólo Figo ofrecía alternativas aunque su juego se fue diluyendo entre la maraña que construyó el Valencia de mitad de campo hacia atrás y al luso siempre le faltaron apoyos a su alrededor.

La pesadilla del Real Madrid tuvo continuidad en el segundo tiempo y su desbarajuste táctico era cada vez más evidente. Oliveira desempeñó a la perfección su labor y encontró petróleo en una jugada extraña en la que Salgado habilitó la posición del brasileño para que sentenciara el choque. El Madrid ya no tuvo fuerzas para reaccionar.
LO MEJOR: Oliveira
LO PEOR: La imagen del Madrid