Leganés: Queco Piña; Rubén Peña, Postigo, Santamaría, César Soriano; Eraso, Paco Candela (Carlos Álvarez, min.55), Velasco (Diamanka, min.55), Aguirre (Eizmendi, min.69); Álvaro y Borja Lázaro.
Racing de Santander: Mario; Francis, Pedro Orfila, Samuel, Iñaki; Andreu, Fede (Juanpe, min.58), Concha, Álvaro; Borja Granero (Saúl, min.78) y Koné (Mariano, min.69).
Goles: 0-1, min.36: Concha. 0-2, min.37: Koné. 1-2, min.60: Diamanka. 2-2, min.91: Álvaro.
Árbitro: López Amaya (Comité andaluz). Amonestó a Fede (min.38), Pedro Orfila (min.55), Samuel (min.57), Iñaki (min.71), Postigo (min.78), Mario (min.93) y Juanpe (min.94). Expulsó por roja directa a Andreu (min.89).
La efectividad del Racing le ha permitido sumar en Butarque su primer punto de la temporada (2-2), ante un Leganés que fue muy superior pero que tuvo que pelear hasta el último aliento para sacar algo positivo.
Salieron los blanquiazules voluntariosos, buscando recovecos en la férrea estructura cántabra. No lo consiguieron hasta casi la media hora, cuando Borja Lázaro ganó en carrera a Samuel antes de que su disparo acabara despejado por las piernas del portero.
La jugada alertó al Racing y le animó a dar un paso hacia adelante. Ese giro de los acontecimientos, cuyo primer capítulo fue escrito por un golpeo de Álvaro que se fue alto, trajo consigo dos tantos santanderinos.
En el primero, Koné condujo el balón hasta la línea de fondo y lo cedió atrás dentro del área. Recibió Francis, aunque su tiro impactó en la zaga. Más suerte hubo en el posterior rechace, que Concha llevó a la red.
Impactado por el revés, el conjunto local sangraría aún más. En la primera posesión del conjunto visitante posterior al saque de centro, Koné recibió en la zona cercana a la media luna antes de disparar desde allí marcando un gol de bella factura.
Demasiado castigo para el Leganés que, más intenso después del paso por vestuarios, comenzó a encerrar en su área al rival. Ese acoso tuvo premio cuando Rubén Peña se vistió de extremo para dibujar una acción con caño incluido que terminaría en asistencia a Diamanka. El centrocampista, dentro del área, realizó un golpeo a la altura para recortar distancias.
Era el aliciente que necesitaban los locales para redoblar sus esfuerzos. A partir de ese momento, se incrementó el dominio para sufrimiento del Racing, que además tuvo que hacer frente a la expulsión por roja directa de Andreu en los últimos minutos.
Fue entonces cuando el gol, que parecía huidizo, llegó. Eizmendi, con un remate de cabeza, encontró el palo. Sin embargo, atento al rechace estaba Álvaro para hacer justicia. El extremo pudo incluso dar la victoria a los suyos poco después, pero su disparo se iría fuera por poco dejando en empate el resultado final.
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