«Estoy tremendamente orgulloso de mi equipo», manifestó Hamilton, de 27 años, que mañana aspira a lograr la decimoctava victoria de su carrera después de haber logrado hoy su vigésima 'pole'.
«Hemos trabajado muy duro durante todo el invierno: nunca nos hemos rendido; y todo el mundo ha seguido empujando y empujando. Hemos tenido años duros, pero todo el mundo en este equipo quiere ganar y ser el mejor. Estoy muy orgulloso de poder haber hecho el trabajo para ellos hoy», explicó Hamilton.
«Mi primera vuelta en la Q3 fue muy especial y al acabarla sentí como que iba a ser difícil que nadie la mejorase. Me esforcé aún más en mi intento final, pero frené un poco tarde en la primera curva y desaproveché la vuelta. Después, sólo pude esperar que nadie me superara», declaró el campeón mundial de 2008.
«Me encanta la calificación, especialmente cuando consigues la vuelta ideal, cuando todo fluye, cuando funcionan los neumáticos y cuando todo de sale bien. Es como estar en el cielo», opinó Hamilton.
«Hoy demostramos que no sólo tenemos el coche más bonito en la Fórmula Uno, sino también el más rápido. Por supuesto que aún queda un camino largo por recorrer y que cuidar los neumáticos será clave. Pero estamos en la mejor disposición de poder hacer una gran carrera», dijo Hamilton.
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