El jefe de equipo de Red Bull, el británico Christian Horner, se reunirá este viernes con la escudería austriaca en una audiencia en la sede del equipo en Milton Keynes (Inglaterra) tras ser acusado de presunto comportamiento inapropiado desde dentro de la estructura.
Red Bull, la empresa austriaca de bebidas energéticas propietaria de la escudería, confirmó el lunes la apertura de una investigación independiente tras conocer estas acusaciones, que vendrían desde una empleada de la escudería.
Por su parte, Horner, de 50 años y jefe de equipo de Red Bull desde 2005, negó «completamente estas afirmaciones», después de que un portavoz de la escudería declarara a la agencia de noticias PA que, después de «tener conocimiento de ciertas acusaciones recientes, la empresa inició una investigación independiente». «Este proceso, que ya está en marcha, está siendo llevado a cabo por un abogado especialista externo», afirmó.
«La empresa se toma estos asuntos muy en serio y la investigación concluirá lo antes posible. No sería apropiado hacer más comentarios en este momento», agregó sobre la situación actual del jefe del equipo y las acusaciones contra su comportamiento en la estructura, antes de que Red Bull presente su monoplaza para 2024 el próximo 15 de febrero, para el inicio del Mundial el 2 de marzo en Baréin.
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