El internacional mallorquín, Antoni Peña, se hizo finalmente con la
victoria en el XVI Maratón de Calvià, con un tiempo final de 2h
15:19. El corredor del Ramis Sastre, que partía como claro
favorito, se impuso con gran claridad al resto de sus rivales,
aunque finalmente no pudo batir el récord de la prueba, establecido
en 2h 13:08 por Radamés González. El podio fue completado por Karol
Dolega, que entró en 2h 19:37, y por Tor Erik Nyquist con 2h 20:19.
La clásica, en la que participaron alrededor de 700 personas,
repartidas en las dos pruebas (maratón y media maratón), no sufrió
las inclemencias climatológicas, y únicamente se vio afectada por
el viento, aunque éste sólo sopló por momentos, y por la dureza del
propio trazado. La carrera empezó a quedar establecida desde los
primeros kilómetros, y ya tras los primeros cinco, el grupo
delantero lo componían Dolega, y Peña, que contó con la importante
presencia de una «liebre», el atleta de Pamplona, Gabriel Garín,
que acompañó al mallorquín durante la primera mitad del
recorrido.
Ya desde el comienzo, el grupo de atletas se estiró mucho, lo
que provocó que tras los 10.000 metros iniciales, el grupo cabecero
se mantuviera intacto, y únicamente aparecían tras ellos, y a una
diferencia cercana al minuto, Serbessa, Nyquist, y el ganador de la
edición pasada, el polaco Jaroslav Cichoki. En la llegada al
ecuador de la prueba, el kilómetro 21, ninguno de los corredores
que venían detrás conseguían acortar distancias, Peña se desprendía
de su «liebre», y únicamente Dolega se mantenía al lado del atleta
balear. Su tiempo al paso por este punto fue de 1h 06:05, y su
objetivo de batir el récord estaba cada vez más cercano a
realizarse.
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