La española Conchita Martínez avanzó por tercera vez en su carrera
a las semifinales del Abierto de Australia con una dramática
victoria sobre la rusa Elena Lijotseva, mientras que su compatriota
Arantxa Sánchez Vicario sufrió la peor derrota de su vida contra la
suiza Martina Hingis.
Conchita, finalista en 1998, necesitó dos horas y 41 minutos
para doblegar a la jugadora rusa por 6-3, 4-6 y 9-7. Hingis,
campeona de este torneo los últimos tres años, degolló a Arantxa
por 6-1 y 6-1 en sólo 45 minutos.
Fue una jornada bien distinta para las dos veteranas jugadoras
españolas. Mientras que Conchita logró su recompensa después de
desperdiciar dos bolas de partido en el duodécimo juego, Arantxa
encajó la derrota más humillante contra Hingis ante la que se ha
arrodillado en trece ocasiones desde su primer enfrentamiento hace
cinco años, cuando la menor de los Sánchez Vicario consiguió
vencerla por primera y única vez.
Fue un día feliz para Conchita. La campeona de Wimbledon en 1994
sufrió no obstante para doblegar a Lijovtseva, que se había
deshecho antes de la estadounidense Serena Williams. La agresiva
jugadora rusa ha progresado mucho desde que encajó un doble 6-0
contra Conchita en Los Angeles en 1994. Golpea con fiereza con la
derecha, se va a la red cuando puede y, allí, es capaz de hacer
filigranas. Y eso desestabilizó a Conchita, que durante todo el
partido dio muestras de su carácter supersticioso, al solicitar
siempre la bola con la que ganaba un punto.
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