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EFE. Palma. El Real Mallorca volvió a ganar un partido en la última jugada y, otra vez, Diego Tristán se convirtió en el gran héroe de la jornada al protagonizar la jugada decisiva, tras un gran pase del camerunés Samuel Eto'o, que había debutado pocos minutos antes. El empate parecía inamovible y ambos equipos se conformaban con el resultado, cuando surgió la magia de Diego para asegurar tres puntos vitales, ante un Celta que había hecho un gran trabajo, pero que pagó muy caro su despiste final.

El equipo vigués planteó un partido muy serio, con cierto aire conservador -Víctor Fernández dejó sólo en punta a Hoogendorp- pero tremendamente efectivo en todas las zonas del campo. De hecho, el Mallorca apenas inquietó a Pinto durante los primeros 45 minutos y todas sus acciones ofensivas se limitaron a balones bombeados o a jugadas personales de Diego Tristán. La reaparición del yugoslavo Jovan Stankovic se hizo notar en el ataque bermellón, pero su larga ausencia de los terrenos de juego -casi tres meses- le impidió jugar al nivel que siempre ha demostrado. Por lo demás, el juego isleño adoleció de profundidad debido, en parte, a que el Celta apenas dejó espacios para maniobrar y siempre le presionó en la zona ancha. Las mejores ocasiones correspondieron al equipo gallego, sobre todo, en los pies de Gustavo López en los minutos 20 y 43, en los que obligó a Leo Franco a lucirse tras sendos remates muy ajustados.

Todo continuó igual en la reanudación, con un Mallorca dominando el partido aunque sin profundidad, y un Celta muy bien situado en el campo, esperando al rival y apurando peligrosos contragolpes. El debut del camerunés Samuel Eto'o en las filas mallorquinistas coincidió con los mejores minutos de juego local. Eto'o sustituyó a Serrizuela (min. 65), y en la primera pelota que tocó dejó sólo a Diego Tristán, que estrelló el balón en el palo derecho de Pinto.

El Celta se atrincheró atrás de forma definitiva en el último cuarto de hora y defendió con efectividad el punto, ante un Mallorca que buscó el triunfo hasta el final y lo consiguió por intermedio de su gran estrella: Diego Tristán.