El torneo de tenis de Roland Garros vivió ayer una jornada atípica
con la aparición de la lluvia. La organización se vio obligada a
suspender todos los partidos previstos tanto del cuadro masculino
como del femenino. Los intentos de retrasar el comienzo fueron en
vano y a las cinco de la tarde se decidía pasar todos los
encuentros a hoy, entre ellos el del mallorquín Carlos Moyá con el
argentino Hernán Gumy en primera ronda.
El tenista mallorquín no salió de su hotel en todo el día y sí
estuvo muy pendiente del móvil para conocer en todo momento si
tenía que jugar o no su primer partido. Carlos nos comentaba en su
hotel de concentración que «este tipo de días son raros para
nosotros pues no es una jornada de descanso y tienes que estar muy
pendiente de como evoluciona el tiempo para ver si al final puedes
o no jugar. Personalmente creo que la decisión de quedarme en el
hotel ha sido la acertada pues en el club hay más tensión y puedes
descansar menos yo he aprovechado para hacer mis ejercicios físicos
y así ir matando el tiempo».
Sobre si hubiera sido mejor jugar el tenista mallorquín era
claro «lo mejor hubiera sido jugar pues así hubiera tenido un día
de descanso hasta el siguiente partido y si hoy supero la primera
ronda mañana volveré a tener partido y todavía en lo que llevo de
temporada he jugado un partido a cinco set y por tanto es mejor
poder tener el día de descanso, máxime si tenemos en cuenta al
nivel que se juega aquí». Para finalizar la breve charla que
mantuvimos con Carlos nos comentaba que «estoy muy bien, no tengo
ningún tipo de molestias y espero poder rendir a un buen nivel y
llegar lo más lejos posible, lo importante es ir paso a paso y por
ello es importante ganar el primer partido para ir cogiendo
confianza en un torneo donde está los mejores jugadores del
circuito y con muchas ganas de conseguir todos el título».
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