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Drac Inca planea el regreso de Jaume Ventura Sala, aunque para asumir funciones de gerente. El club de Es Raiguer ha iniciado la reorganización de su organigrama directivo y en los próximas días quiere dejar prácticamente cubierto un puesto que considera clave. La opción Ventura ha cobrado muchos enteros durante las últimas horas. Alejado de los banquillos desde que fue despedido como entrenador del Inca "función que desempeñó durante casi dos temporadas y media", el catalán se ha dedicado durante los últimos años a impartir conferencias y a dirigir una empresa especializada en soporte técnico.

Jaume Ventura está dispuesto a asumir el reto, aunque el Inca no quiere dar un paso en falso y estudia otras opciones. La gestión desarrollada a lo largo de esta temporada por José Antonio Artigas Lomas ha generado una profunda decepción en el seno de la gestora. La entidad está al borde de una crisis económica sin precedente alguno y la elección del nuevo gerente es sumamente delicada. Ventura parece ajustarse al perfil que busca el Drac Inca. Del catalán se valora su honradez, conocimiento de la entidad y su larga experiencia en el baloncesto profesional.

Otro de los puestos que el club espera cubrir es el de director de marketing. José Ors trabajará la próxima temporada en el Fórum Valladolid junto a Josep Oriol Humet y su ciclo en Inca se ha acabado. Ors, que ya ha comunicado a Sebastià Penya que su futuro está en la ACB, tenía sobre su mesa una propuesta de renovación, pero la posibilidad de trabajar en uno de los clubes más importantes del baloncesto nacional ha resultado determinante. El club ha lamentado su marcha, pero también tiene claro que no puede competir con el Fórum. Sustituirlo resultará complejo, aunque Jaume Grimalt podría asumir sus funciones.

La lista de candidatos al banquillo del Drac Inca ha variado sustancialmente durante las últimas semanas. Pedro Martínez ha firmado dos años con el Tenerife, Quino Salvo seguirá en Menorca, Ricard Casas ha alcanzado un principio de acuerdo con el Manresa; la opción de Andreu Casadevall se escapa a las posibilidades económicas del club y José Luis Oliete maneja ofertas de Alicante y Melilla. Ante esta tesitura, el club se ha fijado en Víctor García, un entrenador con cartel en el baloncesto catalán y cuyo trabajo ha despertado el interés de varios clubes.