La noche del 4 de mayo de 2017, una turista británica salió de fiesta con una amiga por Magaluf. Era su primera vez en España. Las dos jóvenes estuvieron bebiendo alcohol en bares de Punta Ballena, donde conocieron a dos hombres que trabajaban como relaciones públicas en un club de alterne que las invitaron a chupitos en el establecimiento.
–¿Recuerda el nombre del lugar?– preguntó este miércoles la fiscal en el juicio en la Audiencia de Palma.
–No, era bastante tarde y estábamos borrachas- respondió la joven por videoconferencia.
La turista explicó ante el tribunal que se separó de su amiga y uno de los hombres la llevó hasta una habitación pequeña y oscura. «Parecía como una sala de masajes».
El trabajador la empujó sobre una cama. «Mi cabeza daba vueltas por el alcohol». El acusado empezó a besarla y ella en un principio se negó, pero al final le devolvió el beso.
–¿Qué pasó después?– preguntó la representante de Ministerio Público.
–Es difícil para mí recordarlo porque ha pasado mucho tiempo y es algo bastante traumático, pero se bajó los pantalones y acercó el pene a mi boca. Yo le decía todo el rato que no quería. Recuerdo que entró una chica rubia con el pelo corto y le dio un preservativo. Fue todo muy rápido. No me dejaba levantarme hasta que consiguió penetrarme y me quedé como congelada. Horas después, cuando llegamos al hotel en Santa Ponça, encontré dentro de mi vagina el preservativo.
–¿Cómo salió del bar?
La joven suspiró...
–Mi memoria es un poco borrosa, pero el hombre salió de la habitación y yo me quedé unos minutos sola sin acabar de creerme lo que había pasado. Me arreglé como pude, bajé las escaleras hasta el bar y salí lo más rápido que pude de allí.
Al día siguiente la joven volvió con su amiga a Punta Ballena para ver si encontraba el club de alterne. «Conocimos a un hombre que trabajaba para un touroperador británico y le pedimos ayuda. Le enseñamos el edificio en el que había ocurrido la violación y nos contó que era un conocido burdel de rumanos, que tenía mala fama, y que le decía a sus clientes que no se acercaran a ese sitio.
El acusado, que declaró en último lugar y sólo respondió a las preguntas de su abogado, negó la agresión sexual. El hombre explicó que conoció a la chica dos noches antes y que ella le pidió que le enseñara el local en el que trabajaba. El 4 de mayo, los dos se dirigieron a la planta superior y, una vez allí, ella le empezó a masturbar. «Nunca se resistió», aseguró.
La Fiscalía pide una condena de siete años de cárcel para el hombre y que indemnice a la perjudicada con 6.000 euros por los daños morales.
12 comentarios
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Vicent MartínA nen Maffeo
gates perdudes i uns fets de fa 8 anys. Que dimonis poden recordar? Quin motiu hi ha perquè es jutgin aquets fet quan han passat fa 8 anys. Es tindrien que haver jutjat el mateix 2017. De que serveix la justícia despres de 8 anys. Si son innocents vaja tortura durant 8 anys, i si son culpables ja fa 8 anys que tendrien que estar tancats. És una vergonya i és culpa nostra per permetre que la nostra justícia sigui així.
Turistas borrachas de visita cultural en punta ballena, la cuna de la intelectualidad balear, y relaciones públicas de discotecas, seres de luz. La tormenta perfecta para la creación literaria.
Me pregunt jo què feia una turista dins un club d'alterne. Què cercava allà dins?
Si juegas con fuego, te puedes quemar
Qui no vulgui blat que no vagi a s,era.
Segur q no son ni en Andreu ni en iTofol. Res mes q declarar seyories. 😎 🐺🐺
Una de rumanos. Libertad de circulación de trabajadores. Las maravillas de la Unión Europea. Si a esto se le añade la libertad de capitales y su consiguiente libre especulación inmobiliaria de Mallorca para que pase a ser una colonia de alemanes y suecos... La Unión Europea resulta que es de lo mejorcito que nos ha podido pasar.
Punta Ballena, borrachitos, seguro que “algo” más, club de alterne, macarra; LA TORMENTA PERFECTA Difícil caso para el juez.
Ocho añitos de nada ha tardado en iniciarse la fase de juicio. No está mal.