Pablo Nieto protagonizó una carrera para «quitarse el sombrero»,
salió desde la penúltima fila debido a los constantes gripajes de
su moto, lo que motivó que literalmente le cambiasen el motor
entero para la carrera de ayer y la iniciativa surtió su
efecto.
Pablo Nieto mereció la victoria sin ningún género de dudas y,
sin embargo, al final tuvo que conformarse con la tercera plaza por
apenas cinco milésimas de segundo respecto a su ex compañero en
Derbi, el japonés Youichi Ui, pero lo más importante es que este
primer podio de su carrera deportiva le da la moral que le hacía
falta para estar delante a cada gran premio después de ser de los
más rápidos en entrenamientos casi en cada cita mundialista.
La guinda para la saga Nieto la puso su primo Alfonso González,
«Fonsi», que tuvo problemas iniciales en la carrera de 250 c.c.,
pero en cuanto consumió combustible en su moto y la moto fue «más
ligera» en el tren delantero, comenzó una remontada que le llevó
hasta la tercera plaza final y, de haber un par de centenares más
de metros por delante, incluso podría haber puesto en aprietos a
Locatelli, segundo por detrás de Melandri.
Lástima que para subirse al podio en Mugello «Fonsi» tuviese que
apear del mismo a su propio compañero de escudería, Antonio Elías,
que luchó hasta el final con el grupo de cabeza y demostró que ya
es una figura consolidada del cuarto de litro, después de dar los
recitales que protagonizó el pasado año en los 125 c.c. El piloto
mallorquín Jorge Lorenzo (Derbi) salió desde la penúltima línea de
salida y acabó vigésimo.
El italiano Valentino Rossi (Honda RC 211 V) ganó su particular
«duelo al sol» del circuito de Mugello, con ocasión del G.P. de
Italia de MotoGP, a su compatriota Max Biaggi (Yamaha M-1) y
consolida así su liderato en el mundial.
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