Enrique Escande RIFU-MIYAGI
Turquía hizo pedazos ayer el sueño de Japón, uno de los organizadores del Mundial 2002, al vencerle por 1-0 con un tanto Umit Davala, jugador del Milán italiano, y se metió en los cuartos de final del torneo, instancia en la que se enfrentará a Senegal.
Los turcos marcaron el tanto de la victoria en el momento en que mantenían la iniciativa y en la segunda parte se dedicaron a obstaculizar la tibia ofensiva japonesa, carente de ingenio, dinámica y precisión para superar a un equipo compacto, duro en los marcajes y luchador en todos los sectores del campo.
El equipo japonés, que jugó su mejor partido contra Rusia en la primera fase (1-0) y tuvo una destacada actuación frente a Bélgica (2-2), cayó derrotado sin atenuantes, ya que la posesión de la pelota durante una buena parte del partido no le sirvió para agrietar defensivamente a su rival, que será un hueso duro de roer en las instancias decisivas de la competición.
Los turcos controlaron el partido desde los cinco minutos de juego, después de un par de intentos de los japoneses, y se pusieron rápidamente en ventaja a los 12 minutos con un remate de cabeza de Umit Davala a la salida de un córner, acción en la que se movió y disparó libre de todo marcaje en la puerta del área pequeña local.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.