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Adrián R. Huber (Efe)|HUNGARORING
El asturiano Fernando Alonso (Renault) ha colocado a España en el mapamundi de la Fórmula Uno tras convertirse en el primer piloto de este país y el más joven de toda la historia en ganar un Gran Premio, el de Hungría, disputado en el Hungaroring, en las afueras de Budapest. Alonso cubrió las setenta vueltas a la pista húngara para completar un recorrido de 306,873 kilómetros, en un tiempo ganador de una hora, 39 minutos, un segundo y 460 milésimas y venció por delante del finlandés Kimi Raikkonen (McLaren Mercedes) y del colombiano Juan Pablo Montoya (Williams-BMW), que le acompañaron en el podio de la décimo tercera prueba del Mundial más emocionante de los últimos tiempos.

Al llegar, indicó que lo hacía «con buenas vibraciones»; luego pronóstico que lograr la pole era factible; y, finalmente, que, si entraba bien en la primera curva y la fiabilidad le respetaba, podría rematar la faena y ponerle la guinda a un sensacional fin de semana. Alonso la remató. Y la remató a lo grande, liderando la carrera de principio a fin, excepto en la vuelta siguiente a la que hizo la primera de sus tres entradas a boxes, en la que cedió el mando, de manera efímera a Raikkonen.

El asturiano, que el sábado había firmado la pole, confirmó esa primera posición y dominó de principio a fin una carrera en la que llegó a doblar al alemán Michael Schumacher (Ferrari), que aspira a un sexto título sin precedentes que se le ha complicado muchísimo, ya que tras la prueba de ayer, en la que fue octavo, sólo lidera con un punto sobre Montoya (71) y otro más respecto a Raikkonen. Alonso, que en Malasia ya se había convertido en el conductor de menor edad en firmar una pole (a los 21 años, siete meses y 21 días) y en subirse al podio y que en Canadá fue el más precoz en lograr la vuelta rápida, logró hoy una nueva gesta. Con sólo 22 años y 26 días, el genial y gélido piloto del Principado se convirtió en el más joven de la historia en ganar una prueba de Fórmula Uno y ratificó con matrícula de honor una sensacional actuación que también lo fue en parte de mago al augurar todo lo que iba a suceder.