TW
0

C.M.O.
Transmite la misma tranquilidad ante un micrófono que cuando vestía de corto. Frank Rijkaard (Amsterdam, 1962) no se inmuta por el alambre que sostiene su proyecto. El entrenador del Barcelona roció de confianza la previa del encuentro, rehusó contestar a Luis Aragonés acerca de sus afirmaciones sobre la pérdida de grandeza del Barça como equipo y mostró su apoyo incondicional a Kluivert, el hombre que ha monopolizado toda la actualidad azulgrana en los últimos días.

Rijkaard calificó de «final» la cita de esta tarde: «Tenemos que continuar por este camino, mantener la posesión del balón y marcar la diferencia cuando creemos ocasiones. Estoy confiado, el equipo está jugando bien y el partido es importante para nosotros», señaló el técnico azulgrana, quien lamentó la falta de pegada: «En los dos últimos partidos hemos creado más ocasiones y tuvimos mala suerte de cara al gol. No creo que los jugadores del Deportivo o el Valencia tengan más calidad que los nuestros».

Rijkaard apostó por la diplomacia cuando se le preguntó por las opiniones de Luis Aragonés: «Cada uno tiene derecho a decir lo que quiera, él es un entrenador con mucha experiencia y yo respeto a todo el mundo», dijo. Sobre ecaso Kluivert espera que «tenga ganas de demostrar algo. Hemos hablado con él, explicándole la situación y sabe muy bien lo que pasa. Es una situación delicada para él», dijo.