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El motociclismo mallorquín tiene otros referentes más allá de las gestas de Jorge Lorenzo en el Campeonato del Mundo de 125 centímetros cúbicos. Antonio y David Salom se han granjeado el respeto de sus rivales en la Fórmula de Campeones Bancaja-Sólo Moto Sport -la cantera de las futuras estrellas de esta especialidad- y han mantenido en vilo a sus rivales. No en vano, el primero acabó alzándose con la victoria en la general el pasado fin de semana sobre el trazado del Circuito Ricardo Tormo de Cheste, mientras que David se conformó con la cuarta posición, aunque su temporada ha resultado esperanzadora.

Su Yamaha R6 ha ofrecido el rendimiento esperado, de la misma manera que el apoyo técnico aportado por Motos Salom. Antonio Salom fue regular a lo largo de la competición, pese a una grave lesión que dejó fuera de la misma por un breve espacio de tiempo. Dos segundos puestos en Cartagena -donde David logró un triunfo-, un tercero en la primera prueba celebrada en Cheste, un sexto en Albacete y la última alegría de la temporada coronaron a Antonio, quien no pudo protagonizar por problemas mecánicos un duelo espectacular con David.

Estos dos hermanos llevan en la sangre el deporte de las dos ruedas y el rugir de las motos. Su primo Luis, con tan sólo doce años, parece ser el continuador de una saga que ha dado un salto definitivo en sus aspiraciones, que se centran en el Campeonato de España de Velocidad. El triunfo de Antonio Salom se produjo tras una carrera de lo más atípico, pues llegó a Cheste como tercero en la general, pero al subir a lo más alto del cajón y lograr la vuelta rápida se coronó con noventa y tres puntos como nuevo vencedor de la Fórmula de Campeones, en la que se reúnen algunos de los pilotos con más expectativas a corto y medio plazo.