Carlos Moyà se quejó tras ceder ante Andy Roddick de haber
desperdiciado las oportunidades que tuvo durante el partido. Ayer
nada más comenzar el encuentro disfrutó de la primera. El jugador
balear tuvo una pelota de break sobre el servicio de Guillermo
Coria, pero el tenista argentino consiguió salvarla.
En el primer juego con servicio de Moyà, el tenista mallorquín
exhibió un buen primer saque y se colocó con 40-15, pero Coria no
tardó en demostrarle al balear que si quería ganar los puntos
debería rematarlos con contundencia. El argentino logró darle la
vuelta y tras desaprovechar tres pelotas de break, rompió el saque
de Moyà en la cuarta. Coria se colocaba con 2-0 y saque y Moyà ya
había cometido 10 errores no forzados.
Tras el susto inicial, Guillermo Coria se mostró muy seguro con
el servicio. Con 4-1 en el marcador, Carlos Moyà trataba de
mantenerse en el partido. Cuando el marcador registraba un 30-30,
el deportista isleño ejecutó un primer servicio y el juez de línea
le cantó falta de pie. Coria devolvió el saque y la pelota iba
hacia el cuerpo de Moyà, que trató de enviar la pelota hacia el
recogepelotas de la esquina. La bola pegó cerca del juez de línea y
el juez de silla interpretó que el balear le quería dar, por lo que
le advirtió con la posibilidad de amonestarle con la pérdida de un
punto.
Moyà pudo terminar ganando el juego (4-2), pero no olvidó el
incidente. En el octavo juego, volvió a ceder dos pelotas de break
a Coria, que en la segunda aprovechó un nuevo error no forzado de
revés del mallorquín para anotarse el primer parcial (6-2).
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