Luis Aragonés, durante un entrenamiento del Mallorca. Foto: TOMÁS MONSERRAT

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La cuesta de enero se adelanta unas semanas. El Mallorca se ha oxigenado en los últimos días para respirar a pleno pulmón en la recta final de año. Y es que el epílogo de 2003 estará plagado de viajes, concentraciones y partidos. Hasta ocho encuentros en apenas 29 días, seis del campeonato nacional de Liga, uno de la Copa de la UEFA y otro de la Copa del Rey, y con el plato fuerte del Real Madrid para despedir el año.

El Mallorca iniciará su particular travesía el próximo sábado, a las 19.30 horas, con su desplazamiento a Anoeta, y pondrá el punto y final el 21 de diciembre ante el Madrid de los galácticos, que ya visitó Son Moix en el primer partido oficial de esta temporada con motivo de la Supercopa de España, que se adjudicó el equipo madridista tras remontar en el Bernabéu el 2-1 de la ida. Entre la Real y el Real, el Mallorca se medirá consecutivamente al FC Copenhague (casa), Betis (casa), Villarreal, Valladolid (casa), Málaga y Levante. Esta maratón marcará sin duda su futuro porque la mayoría de rivales están situados en la zona media baja, a tiro de piedra del conjunto isleño.

La Real Sociedad medirá el sábado la teórica recuperación mallorquina. El equipo de Luis se ha mostrado solvente a domicilio -ha vencido en sus dos últimos desplazamientos, en Coruña y Copenhague- y el triunfo ante el Murcia (4-1) le permitió abandonar la zona pantanosa de la Liga. El choque de Anoeta ante una Real que está pagando el tributo de jugar en la Liga de Campeones debe marcar el rumbo.

Tras la cita en San Sebastián, el Mallorca recibe al FCK danés en el partido de vuelta de la segunda ronda de la UEFA. El triunfo en Copenhague le permite afrontar el choque del jueves día 27 con optimismo. Luis volverá a tirar de los no habituales para tratar de aparcar la competición europea hasta marzo, cuando se disputen los dieciseisavos.

Apenas tres días después, las puertas del estadio de Son Moix volverán a abrirse para acoger la decimocuarta jornada del campeonato, con el Betis como rival. El conjunto de Víctor Fernández sigue alternando una de cal y otra de arena y a punto de cruzar el primer tercio del torneo de la regularidad ocupan la decimotercera plaza con 13 puntos, sólo dos más que el Mallorca.

El grupo de Luis abrirá diciembre en El Madrigal ante el conjunto de Benito Floro el miércoles día 3. Situados en la duodécima posición con 14 puntos, hasta la fecha se ha distinguido por su gran cantidad de empates (5) que ha logrado.

Tras la visita a Villarreal, será el turno del Valladolid de Fernando Vázquez, un equipo que comenzó con dudas pero que poco a poco está recuperando terreno. El grupo pucelano visitará Palma el 7 de diciembre con la intención de vengar su eliminación de la Copa del Rey la pasada campaña.

En la segunda quincena de diciembre, después de dos intensas semanas, no habrá partido entre semana, por lo que el Mallorca podrá preparar el encuentro de La Rosaleda, el día 14, con más tranquilidad. Los de Juande Ramos se han situado cerca de la zona UEFA gracias a sus cinco triunfos.

La última semana de competición también será dura para el bloque isleño, que no anda precisamente sobrado de efectivos. El miércoles día 17 se jugará su futuro en la Copa del Rey ante el Levante en tierras valencianas y cerrará el curso 2003 en el estadio de Son Moix ante el Real Madrid de los galácticos el día 21 de diciembre.

Será un final de año movido que pondrá las cosas en su sitio y dictará el futuro del Real Mallorca 2003-04.