Bajo el manto mediático que cubre Samuel Etoo, con la resaca de
turrón y cava y los Reyes Magos empaquetando regalos, el Real
Mallorca se encuentra de repente, casi de golpe, con la primera
cita de 2004, un estreno de año tradicionalmente esquivo para el
equipo balear. El grupo de Luis afronta el duelo ante el colista
Espanyol como un auténtico desafío. Los últimos episodios del año
estropearon el guión escrito por el entrenador madrileño en sus
primeros capítulos y el vestuario debe recobrar esa confianza que
le empujó hasta posiciones UEFA tras encadenar cinco victorias
consecutivas.
El Mallorca cierra una primera semana de año complicada -Samuel
Etoo ha monopolizado toda la atención y firmado las polémicas- ante
un rival situado en las cloacas de la Liga que atisba el ecuador
del torneo con un zurrón errático en puntos (8) y una racha de
cinco derrotas consecutivas que, salvo milagro, le empujará al
infierno de Segunda casi una década después.
Pese a que los datos invitan a un «2» fijo, Luis Aragonés ha
intentado mantener la tensión y huir del optimismo. El entrenador
madrileño, consciente de la relajación que implica enfrentarse al
colista, ha exigido prudencia y concentración. «Para nosotros es
una final, como si jugáramos contra Real Madrid o Barcelona», dijo
el de Hortaleza.
Desde el vestuario salieron ayer palabras de respeto hacia el
Espanyol y se evitaron referencias a otros asuntos, principalmente
acaso Etoo. Por cierto que el delantero camerunés, como estaba
previsto, se desplazó ayer con el resto de la expedición y la
intención de Aragonés es la de alinearle, pese a la amenaza de la
Federación Camerunesa, que podría impugnar el encuentro si Etoo
juega hoy en Montjuic.
El punta africano, por cierto, se mide a uno de sus rivales
favoritos. Y es que Etoo, que llegó a ser jugador del Espanyol
durante unos meses aunque no debutó en partido oficial, le ha
marcado un gol a los periquitos en cada temporada, aunque todos
ellos han sido en Son Moix.
La víspera arrojó más dudas a la presencia de Alejandro Campano.
El centrocampista sevillano no se ejercitó con el resto de sus
compañeros porque acudió a visitar a un médico. Pese a todo, Luis
le incluyó en la convocatoria de diecinueve jugadores, aunque si
hoy se despierta con sus molestias musculares dejará su plaza a
Raúl Martín.
El resto del once será el habitual, con las novedades en
relación al choque frente al Real Madrid de Fernando Niño, que
regresa al equipo tras superar su lesión, y de Poli, ausente frente
al conjunto blanco por acumulación de amonestaciones.
Las estadísticas señalan al Espanyol como uno de los rivales más
complicados en la historia del Mallorca. Sólo ha ganado tres veces
allí, una en Sarrià y dos en Montjuic. La última de ellas, por
cierto, con Luis Aragonés en el banquillo. El Mallorca venció 0-1
(gol de Albert Luque) después de que el Espanyol firmara dos postes
en los primeros minutos. A ver si se repite la historia.
Los estrenos de año se le atragantan al Real Mallorca. El equipo
isleño no comienza con victoria en Primera División desde la
temporada 1990-91, cuando se impuso 3-2 al Zaragoza en Palma el 6
de enero de 1991. El Mallorca inauguró 1992 con derrota (1-2 ante
el Barcelona), perdió en 1998 (1-0 en Anoeta), 1999 (1-0 en
Almendralejo), empató en 2000 (0-0 ante el Valladolid), 2001 (2-2
en Vallecas), cayó en 2002 (2-1 en Zorrilla) y 2003 (3-0 en Cádiz
ante el Sevilla).
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.