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Jesús Manzano, ex ciclista del equipo Kelme, asegura en el segundo capítulo sobre sus confesiones en un diario acerca del dopaje en el ciclismo que «hay barra libre con la hormona de crecimiento. Se utiliza a patadas, tanto en competición como en los entrenamientos, y no se está detectando en los controles, hay barra libre para usarla», dice Manzano en el peródico As, donde está confesando desde el miércoles sus experiencias de dopaje en el mundo del ciclismo. Manzano incluso señala varios nombres de medicamentos, como Humatrope, Norditropin, Genotonorm y IGF1, cuyos precios oscilan entre las 60.000 y 90.000 pesetas la caja. Los «rotuladores» y las «pelas», nombres de la hormona de crecimiento y de la EPO (eritropoietina) en el argot ciclista, se aplican en días alternos y no se pueden suministrar todos los días «porque esto no es como las avellanas, sino que hincha y bloquea», según testimonio de Manzano.

«Las dosis se aplican día sí día no, pero poquito y durante períodos de competición o entrenamientos duros, por lo general lo utilizas antes de las etapas de montaña o largas. Antes de comenzar una vuelta grande se hace un tratamiento de varios días alternos de diez o quince cacharros (dosis)», detalla el ex ciclista del Kelme. Según Manzano, «si un corredor se está preparando para una gran vuelta se está poniendo EPO y tiene miedo a los controles. Yo conozco el Eprex, el Neorecormon, el Epocrín, que es EPO rusa. Para llegar a las carreras te preparas con esto. Yo dejaba de tomarla 15 días antes de una prueba, no apuraba más para no jugármela». «Los ciclistas también hemos sido muy burros porque hemos topado no dos veces, sino hasta ocho veces con la misma piedra», señala Manzano, quien explica también cómo se conserva la EPO y para qué se utiliza: «Se usa para el cansancio, te crea menos fatiga, oxigena la sangre», afirma.

«Cuando llegas a una carrera estás quizá con el hematocrito al 50 por ciento y a la semana y media te has puesto en 45 o 46. Si esto no se usara, después de las palizas que nos damos, en cuanto te descuidaras estarías medio muerto, en 37 de hematocrito», asegura Manzano. El ex ciclista de Zarzalejo (Madrid), también habla de las transfusiones. «Para sacarte sangre tienes que estar tienes que estar por encima del valor que impone el reglamento antidopaje de la UCI (54-56 por ciento). Automáticamente coges y te extraes un litro. Una bolsa de sangre te puede bajar de 2,5 a 3 puntos. Yo tuve un máximo de 56 y me asusté. Tomé un montón de aspirinas, que dicen que diluye la sangre. Si no fuera por todo esto no creo que en las grandes vueltas se lograra una media de 41 kms/hora». Manzano también se refiere a la picaresca para burlar a los «vampiros» de la UCI. «Mientras bajan a pasar el control los que tienen los valores más bajos, los ciclistas que tienen los valores más elevados se meten albúmina humana, suero glucosado y bajan a hacerse el control los últimos. En media hora de espera se puede pasar de 50 a 45».