Mientras la plantilla disfruta de sus primeros días de vacaciones,
los teléfonos del estadio de Son Moix echan humo para darle
colorido al Mallorca del futuro. De momento, los únicos movimientos
apuntan a la línea de salida, una puerta que se puede abrir de
nuevo en las próximas horas. Finidi George maneja una suculenta
oferta de la Liga de Qatar, una propuesta económicamente
interesante, que puede aceptar la próxima semana ante la
indefinición expresada por la entidad en torno a su futuro.
En principio, el club le ha comunicado que no cuenta con él
porque ocupa plaza de extranjero. La SAD balear, sin embargo, no le
descarta definitivamente. Su continuidad en la isla dependerá del
cupo de extranjeros. Si a la hora de tramitar las licencias queda
una de las tres plazas vacantes, previsiblemente Finidi será
elegido para formar parte del nuevo proyecto. En caso contrario, se
quedará sin equipo. Esta indecisión y el hecho de que quizás esté
ante el último contrato de su carrera deportiva -tiene 33 años- ha
motivado que Finidi se esté planteando seriamente aceptar la oferta
del equipo qatarí.
Si Finidi se aleja, Edu Moya se acerca. El lateral extremeño es
un futbolista que entra en los planes de futuro y el club ya
negocia con el Tenerife una rebaja en sus pretensiones económicas
iniciales, que rondaba los 170 millones de pesetas. El Mallorca le
considera un futbolista interesante, cuya polivalencia puede ser
útil de cara a un futuro, y confía en alcanzar un acuerdo con el
club chicharrero. El interior sevillano Raúl Martín, cedido al
Tenerife, podría ser utilizado como moneda de cambio. Federico
Lussenhoff, en cambio, maneja ofertas del fútbol mejicano.
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