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El Barcelona ha presentado una oferta formal de 15 millones de euros al Mallorca para fichar al delantero camerunés Samuel Etoo, al margen de que el equipo mallorquinista desee jugadores del club catalán en la negociación, según informaron a EFE fuentes de la entidad azulgrana. Esta es la última oferta del Barca al Mallorca para resolver definitivamente uno de los culebrones del conjunto barcelonista de este verano. El nudo de este negocio se encuentra en el riesgo que puede correr el Mallorca en el caso de que venda al jugador y el Madrid le exija la mitad de la cláusula de rescisión del contrato, que está cifrada en 120 millones. De esta forma, si el Mallorca vende por quince millones de euros y debe indemnizar con 60 millones al Madrid, el negocio sería ruinoso para la entidad insular, pues perdería al jugador y treinta y cinco millones de euros.

Según un miembro del Barça que está tratando el fichaje de Etoo, el Mallorca tiene dos contratos con el Madrid referidos al camerunés. El primero, depositado en la Liga de Fútbol Profesional, es el contrato de compra y venta en el cual el Real Madrid se reserva el derecho de tanteo sobre el jugador. Este derecho de tanteo significa que el Madrid se haría con sus servicios en el caso de que igualase la oferta que tuviese el Mallorca por Etoo. Esta oferta en estos momentos es de 15 millones, pero el Madrid parece que no está interesado en ejercer este derecho porque tiene cubiertas las tres plazas de extracomunitarios para esta temporada. Según el Barcelona, la idea del Madrid es quedarse con el jugador la próxima temporada, en la que optará a él en una puja junto al Mallorca en la que el que oferte más alto en sobre cerrado ante notario se quedará con el jugador, después de abonar al otro club la mitad de la oferta presentada.

En el segundo contrato entre el Mallorca y el Real Madrid, que no está depositado en la Liga y en el que tampoco interviene el jugador, el conjunto madridista estipula una serie de condiciones económicas en el caso de un traspaso de Etoo antes del último año del contrato. Para la última temporada (el año que viene) los dos clubes depositarán ante notario una oferta para quedárselo en propiedad, previo pago de la mitad de esta cantidad al otro club. En este segundo contrato se recoge el aspecto que en estos momentos está frenando la operación entre la entidad insular y el Barca: el Madrid se reserva el derecho a autorizar expresamente y por escrito el traspaso del jugador. Existe en este apartado una cláusula de penalización para el Mallorca en el caso de que venda al jugador, sin autorización, del 50 por ciento de la actual cláusula de rescisión de contrato, cifrada en 120 millones. Por una parte, el jugador ha manifestado que desea firmar con el club barcelonista, con el que, según ha podido conocer EFE, ya tiene cerrado su contrato particular a expensas de que se firme el traspaso entre clubes. Por otra parte, el Barça entiende que si el Madrid no ejerce el derecho a tanteo, recogido en el primer contrato, no debería vetar la marcha del jugador.