AUTOCID FORD BURGOS (25+20+14+25):Mario Díez (14), Steve Horton (8), Toni Smith (27), Adrián Arnáiz (0) y Albano Martínez (11). -cinco inicial-. También jugaron Chus Pinedo (8), Rubén Burgos (7), Fernando Andrés (0) e Iñaki Narroe (9).
15 de 33 en tiros de dos; 12 de 27 en tiros de tres y 18 de 21 en tiros libres. 31 rebotes (23 defensivos). 26 faltas personales cometidas.
DRAC INCA (28+17+14+19): Alberto Alzamora (7), Quique Moraga (10), José María Pedrera (12), Stevie Johnson (18) y Lolo Castro (4) -cinco inicial-. También jugaron Sergio Rodríguez (5), Adrián Boccia (5), Joan Riera (11) y Cris Sneed (8).
21 de 35 en tiros de dos; 5 de 20 en tiros de tres y 21 de 30 en tiros libres. 33 rebotes (23 defensivos). 22 faltas personales cometidas.
Àrbitros: Fraile (madrileño) y Velasco (andaluz). Eliminaron a Chus Pinedo e Iñaki Narroe por parte local y a Lolo Castro en el bando inquense.
El Drac Inca no pudo estirar su buena racha en su desplazamiento a Burgos donde topó con un Autocid que le acabó superando gracias a sus mejores porcentaes de tiro. Los mallorquines que venían de acumular varios éxitos, se vieron desbordados en el último cuarto y desfallecieron cuando peor estaban (84-78). El encuentro estuvo siempre equilibrado y no se rompió hasta el último y definitivo cuarto. En el primer parcial, los inquenses controlaron de forma aceptable el encuentro y se manejó siempre por encima en el marcador aunque lo hiciera con una escasa diferencia. Al menos, logró cerrar el primer capítulo con números positivos y reforzó su autoestima inicial (25-28).
En el segundo cuarto la tónica no varió en absoluto y el equlibrio presidió en todo momento la cita. En el Burgos brillaban de manera especial sus hombres más determinantes y el Inca acumulaba errores en su selección de tiro, pero el partido llegaba al descanso totalmente nivelado (45-45) y todo quedaba aplazado hasta la segunda parte del mismo. La reanudación no deparó cambios y reflejó más de lo mismo. Ninguno de los dos equipos conseguía acumular una renta suficiente como para despegar en el marcador y la presión se repartía a partes iguales en cada uno de los bandos.
El cuadro de Juan Díaz, que había jugado bien pese a sus porcentajes de anotación, se fue perdiendo en la inmensidad del partido y acusó su debilidad en los minutos iniciales del último parcial. En ese punto el duelo se fue quebrando y los beneficios fueron cayendo del lado castellano, que basaba su juego en el buen estado de forma de sus hombres más determinantes, que no perdonaron en los lanzamientos.
Un simple vistazo a la estadística revela el agujero que provocó Toni Smith en los planteamientos gualdinegros. El base anotó hasta 27 puntos firmando unos registros espectaculares, mientras que el Drac Inca presentaba unos números raquíticos (5 de 20 en tiros de tres) en cada si todos sus intentos. El próximo compromisos de los baleares pasa por vencer el próximo fin de semana en casa al Rosalía Peixe, un conjunto con el que coincidió en la Liga LEB y que en estos momentos se encuentra a su misma altura.
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