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Efe|SEVILLA
El jugador estadounidense Andy Roddick invitó ayer a Tommy Robredo, del equipo español que el próximo fin de semana disputará la final de la Copa Davis en Sevilla, a golpear algunas bolas con un bates de béisbol. Roddick, aficionado al béisbol, había golpeado anteriormente varias bolas, en lanzamientos que evidenciaron una gran precisión y potencia, que le había servido su compañero Mardy Fish. Una vez concluido sus ensayos, el norteamericano, al percatarse de la presencia de Tommy Robredo, decidió pasar el palo al tenista español que, sin pensarlo dos veces, lo tomó y se prestó a golpear.

Resultó más que evidente que Robredo debe de seguir en el tenis, porque sus golpes a la bola fueron muy escasos y, naturalmente, mucho menos efectivos que los de Roddick. La invitación fue extensiva al mallorquín Rafael Nadal, que también quiso hacer sus «pinitos» con un deporte eminentemente americano. El resultado fue concluyente, Nadal, pese a sus intento y ganas, no encontró en su punto de mira la bola. Por otra parte, la Federación Española de Tenis estima unos beneficios que oscilarán de 1,5 a dos millones de euros en la final de la Copa Davis entre España y Estados Unidos que se disputa este fin de semana en el Estadio Olímpico de la Cartuja.

Así lo expresaron ayer representantes de este organismo en Sevilla, donde expusieron parte de las cuentas de la organización de esta competición que tiene un presupuesto estimado de seis millones de euros. En el concepto de ingresos se calcula que habrá 2,5 millones por taquillaje, 1 millón por explotación comercial, 600 mil por el canon de la sede y el resto por explotación estática de la pista (vía Federación Internacional de Tenis con contratos comerciales), y explotación de derechos de televisión. El equipo ganador recibirá medio millón de dólares y el subcampeón 270.000.