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Arango ya viste de corto. Un mes después de entrar inconsciente en la Unidad de Cuidados Intensivos de la Policlínica Miramar, tras recibir un codazo del sevillista Javi Navarro en el encuentro disputado el pasado 20 de marzo, el interior zurdo del Real Mallorca comienza a devorar minutos al reloj y a divisar en el horizonte la fecha de su reaparición. Hoy, treinta días después de aquel incidente, el centrocampista venezolano reanudará los entrenamientos junto al resto de sus compañeros. La recuperación de Arango contrasta con el infortunio que persigue a Fernando Niño. El central andaluz, que fue intervenido quirúrgicamente en Madrid a mediados del pasado mes de enero, volverá a pasar por el quirófano para tratar la lesión ósea que sufre en el hueso del talón. Niño, que sólo ha disputado diez partidos en el presente campeonato, será operado el próximo viernes en el Hospital Asepeyo de Barcelona por los doctores Ramón Viladot y Antonio Dalmau.

Tampoco llegaron buenas noticias procedentes de Felipe Melo y Fernando Correa. El centrocampista brasileño estará entre 6 y 8 semanas de baja, es decir se pierde lo que resta de campeonato, debido al esguince del ligamento colateral interno de la rodilla derecha que se produjo en el partido disputado el pasado domingo ante el Valencia. Esta baja complica su futuro en la Isla, ya que en su contrato de cesión figura una opción de compra para hacer efectiva antes del próximo 30 de mayo. El delantero charrúa, por su parte, no olvida los problemas musculares que le han apartado del equipo en los últimos días. En el caso de Arango, aún no hay una fecha fijada para su regreso, pero la cita del próximo 1 de mayo, en Son Moix ante el Espanyol, ya está marcada en rojo en su agenda. Mientras Arango ya ha recuperado las botas del armario, Javi Navarro cumple el castigo de cinco partidos impuestos por el Comité de Competición, que juzgó la acción por la denuncia del Real Mallorca. De momento, el central sevillista ya ha cumplido dos de esos encuentros y el club hispalense está a la espera de la decisión que tome mañana el Comité de Apelación para decidir si, como subrayó su presidente José María Del Nido, recurre a la Justicia Ordinaria.

El jefe de los servicios médicos de la entidad, Joan Pericás, compareció ayer ante los medios de comunicación para analizar la situación de la enfermería. El nombre de Juan Arango monopolizó la rueda de prensa. Pericás quiso aclarar que en ningún momento «hemos exagerado» la lesión: «Nadie del club dijo que su diagnóstico era muy grave, sino grave. Nada más producirse la lesión, es cierto que se vivieron momentos complicados por las dificultades para respirar. Pero en ningún momento exageramos nada, tal y como se ha especulado en algunos sitios». Pericás se felicitó por la evolución que ha experimentado el venezolano: «Entrena individualmente desde hoy (por ayer) después de haberse ejercitado una semana en el gimnasio, y podría jugar en quince días. Los plazos de recuperación se están cumpliendo y, además, no le quedará ningún tipo de secuelas. Mañana se cumplirá un mes de su lesión y mañana se incorporará al grupo, tal y como se estableció en un primer momento. Después deberá jugar con una máscara a medida, una protección especial para evitar golpes en la zona dañada. Es probable que pueda estar a disposición del entrenador para el partido ante el Espanyol».