TW
0
Benfica 0
Villarreal 1

BENFICA: Nereu; Nelson, Luisao, Anderson, Leo; Geovanni, Petit, Manuel Fernandes, Simao; Karagounis y Nuno Gomes.
Cambios: Mantorras por Karagounis, Pereira por Geovanni y Nuno Asis por Anderson.

VILLARREAL: Barbosa, Venta, Gonzalo, Alvarez, Arruabarrena; Josico, Senna, Sorín, Riquelme; José Mari y Forlán.
Cambios: Lucho Figueora por Forlán, Guayre por José Mari y Peña por Senna.

Àrbitro: Frank de Bleeckere (BEL). Mostró cartulina amarilla a Arruabarena (m.55), Gonzalo (min. 57).

Goles:
0-1, minuto 81, Senna.

Alvaro Blanco|LISBOA

El Villarreal logró ayer su primer triunfo de la Liga de Campeones, al vencer (1-0) al Benfica en el Estadio de La Luz con un golazo del brasileño Senna, que da a su equipo el liderato del grupo y le concede muchas opciones de pasar a los octavos de final de la competición. El conjunto español, conocedor de la importancia de este partido y de la escasa renta que dieron los tres empates cosechados en el mismo número de jornadas del torneo, salió con ganas de victoria, con un planteamiento muy ofensivo y mirando la meta defendida por el joven Nereu.

El peligro lisboeta se apagó hasta la media hora de juego, mientras el Villarreal puso mayor empeño y, desde las bandas, pusieron varios balones en el área defendida por la zaga portuguesa, que no lograba quitar el miedo a la grada. En estos momentos de desconcierto local, Forlán y Riquelme recibieron sendos balones en la frontal del área, pero ni el uno ni el otro lograron batir a Nereu. Si el segundo cuarto de hora fue visitante, la alternancia llevó a que el Benfica dispusiera de sus pertinentes lances con opciones de gol.

En el minuto 33, Nelson se internó por su banda y pasó a Nuno Gomes, que toca atrás, para que el lateral realizase un disparo raso, que tras tocar en un defensa del Villarreal, pone en dificultades a Barbosa, que finalmente logró detener, no sin cierto suspense. El guardameta argentino fue protagonista, aunque en esta ocasión de manera negativa, al dejarse arrebatar un balón en el extremo izquierdo del área grande, desde donde Petit, con escaso ángulo, no pudo marcar, a pesar de tener la meta vacía.