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Centímetros y aire fresco. Esa va a ser la aportación de Robert Maras a un Palma Aqua Mágica que da un salto de calidad con su incorporación. El pívot alemán puso fin a su accidentado periplo en Maó y cambia de Isla y categoría. Llega a la LEB como una de sus referencias interiores de la categoría (2,16) y es la gran apuesta del conjunto de Doce para seguir entre los mejores. Internacional, subcampeón de Europa, bronce en el Mundial de Indianápolis, triple campeón de la liga germana, jugador de Euroliga... Y pese a ello, el Llanera optó por no renovarle y hacer oídos sordos a la petición de Curro Segura. Maras y el Aqua Mágica se cubrieron las espaldas. De esta manera, el Palma se asegura el concurso del techo de la LEB hasta final de temporada y cubre la baja por lesión de Iker López, operado con éxito por el doctor Alfonso del Corral de su grave lesión de rodilla. Ahora, la posición de dos es la gran prioridad. Un viejo conocido, el portugués Pedro Nuno está en la agenda, pero los cortes con pasaporte ACB pueden ofrecer una mejor alternativa.

El hecho de descender de categoría no supone un paso atrás en la brillante trayectoria de Maras. «Es una buena ocasión para demostrar que podemos ascender a la ACB. Estoy muy feliz de llegar a este equipo, porque es uno de los punteros desde el principio de la temporada y, no sólo debe estar entre los mejores, sino que también podemos ganar la Copa Príncipe. Sería una buena manera de demostrar que somos candidatos a estar entre los dos mejores», significó Maras, cuya pareja se mostró encantada por la decisión tomada por el jugador, todo un ilustre para la categoría de plata.

De sus nuevos compañeros, pocas referencias tiene, aunque ya se ha preocupado de acumular información. «Sé de ellos por lo que han hecho esta temporada, últimamente les he seguido, pero a pocos les conozco, aunque tengo muchas ganas de hacerlo y ponerme a trabajar de inmediato», añadió ecinco que intentará hacer sombra a Robert Battle. Pese a estar un peldaño por encima de la LEB, el alemán reconoce haber seguido de cerca la nueva liga que le abre los brazos. «Es muy fuerte y exigente, la diferencia con la ACB existe, pero no es tan grande como en otros países y eso te atre. No solo a mí, sino a otros jugadores de nivel».

El desenlace de su paso por el Llanera no ha sido lo grato que esperaba, por lo que Maras ha optado por «pasar página. El mundo del deporte tiene estas cosas y debes asumirlas. Menorca fue una gran experiencia para mí, pero mi presente y mi futuro pasan por el Aqua Mágica y esta es mi única preocupación. Lo otro es pasado y no vale la pena hablar», admitió.

Sabe que la competencia va a ser feroz bajo los tableros. Su presencia ayudará a oxigenar el banquillo y dar un respiro a sus compañeros de posición tras un arranque frenético (8-2). Con Maras, el nivel de los entrenamientos se disparará, pero el jugador sabe que llega «a un bloque completo en todas las posiciones. Tendré que ganarme los minutos y los voy a aprovechar».

Papel testimonial
Condenado a un papel meramente testimonial a las órdenes de Curro Segura, el Palma le da una oportunidad para darse a conocer en una de las ligas más exigentes del planeta. Un escenario que le permitirá coincidir con un viejo amigo y compañero de selección: Jan Jagla. Es el jugador del Drac Inca uno de sus referentes en esta nueva etapa bajo el amparo de las siglas LEB. «Somos muy amigos, y sé que está muy contento de estar en una isla en la que residen tantos alemanes. Ese fue otro de los condicionantes, además de la oferta deportiva, que hizo que me inclinara por el Palma», dijo. De la misma manera, sabe que su amigo va a ser ahora su rival, «ya que el Inca es el rival directo, pero será una rivalidad en la pista, después todo vuelve a la normalidad. Seguro que ese partido va a ser especial, pero debemos tener claro, y yo el primero, que salimos a ganar todos los partidos».

Con 27 años, Maras llega a Son Moix con el cartel de estrella y hoy pasará el preceptivo reconocimiento médico antes de ponerse de manera definitiva a las órdenes de Eloy Doce, quien no perdió ni un instante en conocer a su nuevo pupilo y estuvo en Son Sant Joan para darle la bienvenida. El domingo (Son Moix, 19 horas) y con el Plasencia como testigo directo, Maras dará sus primeros pasos en la LEB. El arranque de un reto personal y profesional que le debe llevar hasta la cima. Tiene claro que el Aqua Mágica «puede subir a la ACB», una competición que conoce bien tras sus pasos por el Caja San Fernando y el Llanera Menorca. «Es la mejor del mundo, siempre dejando al margen a la NBA», indica Robert Maras, que vuelve a Mallorca -realizó con Alemania el stage previo al Eurobásket-, pero en esta oportunidad lo hace para instalarse definitivamente en un proyecto «serio». Doce no podía esconder su satisfacción por la llegada del nuevo efectivo. «Será importante, por lo que pueda aportar dentro y fuera de la cancha. A estas alturas, le necesitábamos, y no puedo esconder que se trata de uno de los mejores interiores de la categoría, pero eso lo veremos cuando entre en acción, pero sus referencias son inmejorables», explicó el hombre que llegó para revolucionar la liga.