TW
0

A Héctor Cúper se le amontonan los problemas al tiempo que se le llena la enfermería. Las exploraciones confirmaron ayer las previsiones más pesimistas y el técnico argentino va a tener que encarar uno de los tramos más delicados de la Liga sin uno de sus hombres más desequilibrantes. Cristiano Doni, que el martes cayó fulminado en uno de los campos de Son Bibiloni tras dañarse el tobillo izquierdo, será baja las próximas cuatro semanas y se perderá todos los partidos que quedan hasta final de año.

El italiano padece un esguince de segundo grado que requiere tratamiento ortopédico y fisioterapia y no volverá a trabajar sobre el campo hasta el comienzo del 2006. Por entonces ya se habrá perdido las citas ante Alavés, Osasuna, Atlético de Madrid y Valencia, que muy probablemente marcarán el rumbo del Mallorca.

El doctor Joan Pericàs ya había advertido tras la desafortunada acción del italiano que sería muy difícil recuperarlo para el partido del domingo en Mendizorroza, pero nadie esperaba un desenlace tan amargo como el que finalmente se ha redactado. Esta ausencia va a obligar al técnico a modificar todos sus planteamientos, ya que el ex de la Sampdoria se había convertido en uno de los fijos de la sala de máquinas y lo único que se discutía era el nombre de su acompañante.