La Copa, en juego

Por otro lado, en el rival de esta tarde milita un jugador que se marchó de la Isla por la puerta de atrás y con problemas. Ismael Torres retorna al pabellón inquer tras haber vestido la elástica gualdinegra durante dos meses, por lo que se espera que el recibimiento que tenga sea bastante hostil. No en vano su contratación por el club andaluz estuvo precedida por una polémica en la que el club inquer entendió que el jugador había incumplico el compromiso contractual que había adquirido. Y es que el jugador dejó la entidad que preside Joan Rubert sin dar a conocer su intención y sin cumplir los periodos estipulados en su acuerdo con el Drac, que a raíz de su marcha tuvo que trabajar a marchas forzadas para lograr un recambio de garantías. El adió de Torres coincidió con la lesión de Rogelio Legasa, algo que dejó mermado el potencial interior de los inquers, que posteriormente darían muestra de su ambición en la presente campaña al firmar a Jan Jagla, que progresivamente va mejorando su particular aportación.

Junto a él retornará el mallorquín Alberto Corbacho, que está cuajando una gran temporada en Huelva después de que el Unicaja de Málaga hubiera decidido que el isleño tenía una buena oportunidad para foguearse en tierras onubenses con un conjunto que está consolidando su proyecto a base de merodear los puestos de privilegio. Sin embargo, el Drac Inca quiere hacer valer su condición de líder y su mejor juego para batir al conjunto que dirige Quim Costa, que la pasada jornada venció al Calpe. Además, los andaluces también cuentan con posibilidades de acceder al torneo del ko, puesto que suman nueve victorias y tienen dos partidos por delante. Asimismo, en la plantilla gualdinegra preocupa el gran estado de forma del Huelva, que ha vencido los últimos cinco partidos a domicilio que ha jugado (Zaragoza, Tenerife, Plasencia, La Palma y Melilla).