Amador Pons12/01/06 0:00
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La plantilla de la Direcció General d'Esports ha aumentado tras el parón navideño. Después de que Jaume Matas y Rosa Puig consiguieran retener a Pepote Ballester -presentó su dimisión antes de Navidades-, los responsables del Ejecutivo balear han considerado las propuestas del director general y han modificado el organigrama. El nuevo año ha llegado con incorporaciones y nuevas funciones para los técnicos que ya estaban en el equipo. Pepote Ballester explicó a esta redacción que «la Direcció General d'Esports había asumido demasiadas competencias que habían provocado que el equipo quedara desbordado. Le expliqué a la consellera y al president que era necesaria una reestructuración para poder responder a todas las necesidades».

Dentro de esta reestruturación aparecen nuevos nombramientos como el del licenciado en INEF Xisco Lliteras y nuevas responsabilidades para técnicos como Chichi Soler o Jorge Moisés. Pepote Ballester consideraba necesario la inmmediata incorporación de «un licenciado en Educación Física y de una persona que se hiciera cargo de las infraestructuras». En este sentido van a jugar un papel importante dos personas. «Xisco Lliteras es un licenciado en INEF que ya conocía y del que tenía muy buenas referencias. Su función va a ser fundamentalmente la coordinación de aspectos técnicos. Y Jorge Moisés, que es el director gerente del Consorcio del Velódromo, la construcción deportiva más importante en estos momentos».

Los cambios en la Direcció General afectan también ha técnicos que llevan con Pepote Ballester desde inicios de la legislatura. «Hay planes nuevos para gente como Chichi Soler. Con su experiencia puede aportar muchas cosas y creo que deberíamos aprovecharlo más. Por ejemplo los centros de tecnificación están creciendo muy rápido y pienso que es la persona adecuada para solventar todas las inquietudes de los deportistas baleares que están en el alto rendimiento o a punto de llegar». Las novedades también van a afectar a los gerentes de la Fundació Illesport y de la Escuela Balear de l'Esport. También van a mantenerse hasta el final de la legislatura los delegados con los que está contando últimamente en Menorca e Ibiza. «Son fundamentales porque se perdía demasiado tiempo en las visitas. Así cuando viajo a Menorca o Ibiza ya sé cuáles son realmente los problemas que tienen y es más fácil buscar soluciones».