06/03/06 0:00
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Carlos Román|SANTANDER
El empate dejó un poso agradable en el vestuario del Real Mallorca, que destacó la importancia de mantener la racha positiva de los últimos encuentros y el hecho de no haber encajado un solo tanto desde el cambio en el banquillo. La plantilla afronta el duelo ante el Villarreal con una mentalidad renovada merced a la buena línea de sus últimos compromisos, pero no deja lugar a la relajación teniendo en cuenta la igualdad reinante en la zona baja de la tabla clasificatoria.

Guillermo Pereyra, que tuvo que pedir el cambio por problemas físicos, analizó que «el equipo ha rendido y ha conseguido un punto muy importante en un partido de mucha guerra, con mucho contacto y con mucha gente en el centro del campo, que estaba muy pesado. La verdad es que se hizo lo que se pudo». Además, también añadió que «ha habido mucho roce y la idea era salir a por los tres puntos e incluso en algunas fases del partido hemos presionado en su campo, pero hay que tener en cuenta que teníamos delante a un equipo necesitado y por eso no nos vamos disconformes con lo conseguido».

El centrocampista argentino resaltó que «acumulamos tres semanas sin perder y mejorando, pero hay que ser conscientes y lo somos de que hay que seguir trabajando para despegar del fondo».

Fernando Navarro, que ayer disputó su partido número 50 en Primera División, afirmó que «nosotros ya sabíamos que el Racing es un equipo aguerrido y agresivo en el que no ha habido un juego brillante pero sí se ha luchado». El lateral catalán advirtió que «hemos tenido alguna oportunidad de crear peligro al contragolpe, pero también es cierto que ellos han dispuesto de ocasiones».

Por otra parte, sobre las dificultades de los puntas rojillos para crear peligro Juan Fernando Arango, que aseguró no haber notado el cansancio acumulado tras disputar un partido amistoso con su selección ante Colombia, opinó que «ellos han defendido bien con jugadores que han sabido emplear su oficio, experiencia y contundencia, pero se ha sacado un buen resultado y un punto importante». Además, también añadió que «el campo estaba en muy malas condiciones: blando y disparejo. Perjudicó a ambos y motivó que fuera un partido feo».

El internacional venezolano, que volvió a formar pareja de delanteros con el argentino Leonardo Pisculichi, dio especial importancia al hecho de haber encadenado una racha de resultados positivos para invertir la dinámica exhibida con Héctor Cúper en el banquillo: «Hemos tenido tres partidos con resultados positivos y ha ido bastante bien para tener otra mentalidad. Ya hay que pensar en el próximo encuentro. El Villarreal jugó ayer un partido muy intenso y el miércoles tiene otro partido muy importante en la Liga de Campeones. Nosotros vamos a intentar presionar porque necesitamos los tres puntos».