Un elaborado empate en el Sánchez Pizjuán y un puñado de resultados
favorables -suma seis jornadas sin perder, la mejor marca del
curso- han provocado que el Mallorca se sumerja esta semana en
epartido del año. El grupo que dirige Gregorio Manzano es
consciente de que sobre el césped de Son Moix se pondrá en juego
mañana (20.00 horas) más de media permanencia y el cruce ante el
Cádiz se prevé determinante para descongestionar el fondo de la
tabla de aquí a final de temporada. No será un encuentro más. Los
mallorquinistas quieren poner tierra de por medio y los gaditanos,
seguir enganchados a los números para conservar la esperanza. Un
duelo de alto voltaje que va a tener un papel determinante en el
epílogo del torneo.
El Mallorca ya sabe lo que es posicionarse ante una final de
estas características. La pasada temporada vivió un puñado de
partidos terminales que desembocaron en la permanencia en la última
jornada. Esta vez, sin embargo, le va a tocar hacerlo en un
ambiente muy distinto. Notará el calor de sus aficionados, pero el
hecho de jugar en un horario todavía laborable restará afluencia a
las gradas. No obstante, desde el club solicitan el apoyo de la
hinchada para un encuentro marcado en rojo en la agenda
mallorquinista. En el Mallorca el trabajo de mentalización también
es evidente. Aunque la mayoría de futbolistas llevan varios días
admitiendo el valor de los puntos en juego, alguno de ellos,
probablemente en un intento de restarle presión al plantel, ha
destacado que la vida continuará después de ese encuentro. Tal vez
unicamente se trate de una maniobra orientada al exterior porque es
evidente que una derrota le empujaría de nuevo a las arenas
movedizas de la clasificación. El triunfo, eso sí, le permitiría
dejar al Cádiz cinco puntos por debajo -más el golverage- a falta
únicamente de nueve jornadas.
Los isleños cuentan además con una ventaja añadida con respecto
a los gaditanos y es que no estarán marcados por la ansiedad que
sacude en estos momentos a los hombres de Espárrago. Además, el
Mallorca ya se impuso en el partido de ida disputado en el Ramón de
Carranza (1-2) y eso le concede cierta tranquilidad ya que un
empate tendría mucho más valor que para los andaluces. El Cádiz se
presenta en la Isla mermado por las bajas y con un lastre de
resultados negativos en sus alforjas. De hecho, sólo ha celebrado
un triunfo en las nueve últimas jornadas y apenas ha atrapado seis
puntos en toda la segunda vuelta, casi la mitad de los que totaliza
el conjunto bermellón.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.