Consumado el primer gran objetivo de la temporada -alcanzar las series de ascenso- Joan Rubert ha movido pieza y ha ofrecido un contrato de larga duración -tres temporadas- a su actual entrenador. Paralelamente, el máximo mandatario del Drac Inca también ha servido una propuesta de continuidad a Willy Villar, el director deportivo de la entidad durante los últimos años.
Aunque el Drac Inca está a punto de enfilar el tramo más determinante de la competición, Rubert quiere sentar las bases de futuro y su apuesta es clara. En el caso de Villar, el dirigente lleva tiempo intentando prolongar su estancia en la entidad. Sobre el papel, no debe haber excesivos problemas. El canario se encuentra a gusto en el club, donde siempre ha gozado de un amplio margen de confianza.
De hecho, la fe de Rubert en Willy Villar es máxima y lo mantuvo en su puesto incluso tras el descenso de categoría y después de otra decepcionante temporada en la LEB 2, donde el equipo fue incapaz de superar el primer playoff (el Hospitalet le endosó un contundente 3-0). En el capítulo del entrenador, Joan Rubert le ha hecho llegar su propuesta a través de Willy Villar. Según ha podido saber esta redacción, emaño no se ha mostrado muy receptivo.
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