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La angustiosa presencia del Palma Aqua Mágica en las series de ascenso a la Liga ACB supondrá al club de Ciutat un desembolso económico ligeramente superior a los 120.000 euros (unos 20 millones de las antiguas pesetas). Esta cantidad corresponde a la suma de la nómina del mes de abril y a unas gratificaciones especiales acordadas a principio de temporada con la plantilla. El Aqua Mágica, que deportivamente había dilapidado su crédito en una segunda vuelta fase regular ruinosa, ha alcanzado los playoffs en el último suspiro y gracias a la ayuda del León Caja España, que paradójicamente será su adversario en los cuartos de final. El Palma cumplió en la cancha del Drac Inca y se adueñó del derbi (43-67), aunque necesitaba de otros factores para meterse en los playoffs. Un triple de Bulfoni (ex jugador del Inca) en la última acción del encuentro que disputó el León en Santander (66-67) abrió las puertas de las eliminatorias. Eso si, en una situación de clara desventaja para el equipo que ahora entrena Àngel Colino.

El Aqua Mágica se cruzará con el mejor equipo de la fase regular, un conjunto exclusivamente diseñado para regresar a la ACB y que además administrará el factor pista. Nadie quería encontrarse con el Palma en los playoffs, pero el León es el gran favorito. La estadística delata que el conjunto castellano nunca ha superado a un balear en las eliminatorias que conducen a la ACB, aunque su verdugo siempre ha sido el mismo: el Menorca.

El primer gran naufragio castellano se fecha en la temporada 00/01. El León, que había llegado a la LEB procedente de la máxima categoría, completó una fase regular extraordinaria (también acabó primero), pero en la primera eliminatoria topó con el Menorca y se quedó fuera de la pelea a las primeras de cambio (1-3). La escuadra dirigida por Quino Salvo ganó el primer partido de la serie y después sentenció en Maó. En semifinales se encontró con el Granada, que había eliminado al Drac Inca (3-2). El segundo y último cara a cara entre el León y el Menorca es reciente: la temporada pasada. No obstante, esta vez el cruce fue en semifinales y con el factor pista para los baleares. La escuadra de Curro Segura no dejó escapar una ocasión única para agarrar la ACB. Se apropió de los dos primeros duelos disputados en Maó y sentenció en el cuarto encuentro. Dos tiros libres errados por Barnes con el tiempo agotado en el primer partido marcaron esta histórica eliminatoria.