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Efe|MADRID
El juego de Rafael Nadal aparecerá reflejado en un videojuego en el que el doble ganador de Roland Garros lucha contra imaginarios rivales, con una obsesión, acabar haciendo todo 'aces'. «Para la próxima temporada mi objetivo es sacar más fuerte y colocando mejor la bola para terminar haciendo todo 'aces'», dijo el jugador mallorquín durante la presentación del videojuego Rafa Nadal Tennis que la firma Nintendo DS ha creado para él. «Es un honor tener un juego con mi nombre. Aparezco en otros, pero en éste estoy sólo. Es mi juego. Es muy estratégico, te permite colocar la bola donde quieras, es rápido y divertido«, dijo. «Quiero mejorar la potencia y la regularidad y para eso llevo cuatro días haciendo en total mil saques durante los entrenamientos», señaló el jugador de Manacor. Nadal hizo un repaso a lo que ha sido su temporada y dijo que se sentía satisfecho, sobre todo de la última parte del año. Nadal ha terminado por segunda vez esta temporada como segundo jugador del mundo, después de comenzarla lesionado. Ha ganado cinco títulos, Roland Garros otra vez, y ha alcanzado la final de Wimbledon. El jugador considera que la clave de su estabilidad es que ha aprendido a estar «más tranquilo».

Todo no han sido buenos momentos, y Nadal ha acabado la temporada con 59 victorias y 12 derrotas, un balance que deja ver que no es imbatible, pero Rafael resta importancia a este hecho y admite que «sólo tuve bajón en dos torneos, Toronto y Cincinnati donde no estuve a la altura o al nivel que debía, pero luego he estado a un buen nivel en Madrid y en Shanghai», explicaba el tenista, que a la par recordaba que «en Copa Davis saqué adelante un partido muy importante contra Volandri, cuando él venía jugando muy bien, haciendo final en Bucarest, y luego ganando en Palermo, lo que demuestra que estaba rodado y jugando bien sobre tierra. Y en Shangai he vuelto a jugar a un gran nivel, ganando a dos top ten. Perdí un partido contra Blake, que no sé si debería haberlo perdido, o en su defecto como mínimo en tres sets. Y contra Federer jugué un partidazo, pero él estaba insuperable».

La dureza de la temporada le ha servido para madurar y saber buscar sus puntos débiles. El de Manacor lo tiene claro y sabe que ha aprendido «que lo hay que hacer siempre es estar muy tranquilo. Después hay que trabajar, pero cuando uno está tranquilo es cuando mejor salen las cosas. Ha sido una temporada larga, dura pero también muy bonita, mucho mejor de la que podía haber esperado», explicó. El balance del curso no puede ser mejor para el deportista, que se muestra «satisfecho de la temporada en sí. Mi segundo título de Roland Garros y la sesión de tierra ha sido increíble, repetirla ha sido impresionante porque no me lo esperaba, y luego, claro está, la final de Wimbledon. Estoy contento del US Open también, aunque hice cuartos de final. Jugué bien por primera vez ahí y tuve buenas sensaciones, aunque al final siempre te queda un poco de mal sabor de boca al perder un partido así contra Youzhny, porque llegar a las semifinales es siempre un salto. Pero estoy contento, logré clasificarme para la Copa Masters de Shanghai y he hecho un buen papel allí».