TW
0

Jorge Muñoa|SEVILLA
Los campeones del mundo dieron un repaso en toda regla a Portugal en la inauguración del Europeo 2007 en Sevilla, que vibró con el retorno a la competición oficial de Jorge Garbajosa, aclamado por la afición y arropado por el equipo tras casi seis meses de ausencia de las pistas el día del primer aniversario del triunfo en el Mundial de Japón.

Portugal fue el convidado de piedra. Disfrutó de las mejores localidades del pabellón San Pablo para ver en acción a los campeones del mundo, implacables frente al rival menos dotado del grupo B, cuyo liderato ya reposa en manos del equipo dirigido por José Vicente Hernández.

España anuló cualquier atisbo de resistencia lusa con los hombres que salieron del banquillo para relevar al quinteto inicial, ligeramente modificado por la ausencia de Juan Carlos Navarro, fuera de combate por una microrotura fibrilar en el adductor de la pierna derecha y baja, en principio, para la primera y la segunda fase.

La selección de Pepu Hernández consintió un 5-1 de inicio y luego, tras un pequeño tira y afloja consecuencia de la inquietud del estreno más que de otra cosa (11-12), desbancó a los portugueses con la contundencia de una apisonadora.