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Efe |BARCELONA
El Barca tiene esta noche ante un rival de prestigio, el Sevilla, una gran oportunidad para demostrar que su crecimiento, tras la victoria europea ante el Olympique de Lyon (3-0), es un hecho, en un partido entre dos candidatos al título liguero.

Después de las dudas generadas por los azulgrana tras el empate cedido en Pamplona, en un partido con una nula producción ofensiva, el encuentro europeo sirvió para calmar al entorno barcelonista tras la goleada firmada ante el campeón francés, con Leo Messi como principal estrella.

La única novedad en la convocatoria es la de Eidur Gudjohnsen. En total, el técnico holandés ha citado a 19 jugadores, porque «3 ó 4 futbolistas», según dijo Frank Rijkaard, arrastran problemas físicos.

El debate se centrará en torno a la figura de Ronaldinho. El brasileño fue silbado por algún sector de los aficionados ante el Lyon y la totalidad de la plantilla salió en su defensa. El centrocampista no está en su mejor momento, ni físico ni mental, lo cual ha supuesto que haya sido sustituido consecutivamente en los últimos tres partidos jugados.

En todo caso, el momento de juego de Messi -autor de la jugada del 1-0 y del 2-0 en la Champions- esconde la necesidad de cargar con el peso del equipo en un sólo jugador, como ocurría en el pasado con Ronaldinho.

La duda estribará en si Rijkaard continuará dándole protagonismo al Gaucho o, por contra, se decide a alinear de salida a Andrés Iniesta, quien fue el revulsivo en el último partido.

Frente al Sevilla, el técnico holandés tendrá ocasión de repetir la defensa, la línea del equipo más sobria, un cuarteto formado por Zambrotta y Abidal en los laterales, con Márquez y Milito en el centro. Salvo la posibilidad de la entrada de Iniesta por Ronaldinho o por Xavi, o del estado de alguno de los jugadores con problemas físicos, Rijkaard no tocará el esqueleto de su equipo, visto el resultado ofrecido frente al Lyón. En el partido de la temporada pasada en Barcelona, Ronaldinho marcó dos tantos (uno de penalti) y el tercero lo firmó Messi. El Sevilla llega herido en su orgullo tras salir goleado (3-0) en Londres frente al Arsenal. Los sevillistas, poco acostumbrados en las últimas dos temporadas a que un rival lo supere con claridad, vieron como en el debut en la Liga de Campeones el conjunto inglés fue netamente superior, por lo que ahora llegan mucho más receloso de su potencial y más ante un rival de calidad.