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Las molestias de Jonás y la pataleta de Arango han restado protagonismo a la visita de mañana al Ruiz de Lopera. El Mallorca visita al Betis de Cúper con la duda del centrocampista argentino (por los golpes recibidos el pasado miércoles), hasta ahora el mejor jugador de la plantilla, y con el venezolano enfadado con la grada del Ono Estadi. Gregorio Manzano explicó ayer que decidirá hoy el once en función del estado físico del «Galgo», quiso restarle importancia a las declaraciones de Arango y dijo que no hay que fiarse de los resultados del equipo andaluz en el tramo inicial del campeonato. «En esta Liga hay muy poca diferencia entre todos los equipos».

Gregorio Manzano sacó pecho por el equipo. El técnico jienense se mostró orgulloso de que el grupo balear tenga «capacidad de reacción». En las dos últimas jornadas el Mallorca ha dado la vuelta a un marcador adverso y para el entrenador eso responde a la «fuerza y la mentalidad de los futbolistas. El miércoles no reaccionamos por la pitada de los aficionados sino por el orgullo. En la caseta no hablamos de los pitos, simplemente salimos convencidos de que se podía dar la vuelta al encuentro».

Si alguien representa actualmente es el espíritu de entrega de este Mallorca, ese es Jonás Gutiérrez. El «Galgo» se ejercitó ayer al margen del grupo por precaución ya que tiene la pierna derecha dolorida por los golpes que recibió ante el Valladolid, pero Manzano se apresuró a decir que «no es nada grave». El preparador bermellón comentó que «tenemos que esperar a ver cómo evoluciona porque se trata de un golpe y de un día para otro pueden cambiar las cosas. Todavía no hemos decidido pero esperamos poder contar con él el domingo».

La posible baja de Jonás es algo a lo que Manzano no quiere darle excesiva importancia. «La premisa es que las bajas no sean trascendentes. Si no pudiera jugar confiamos en que el equipo siga rindiendo con el compañero que juegue. En el partido contra el Valladolid está claro que Jonás fue uno de los causantes de la remontada, pero también hay que valorar a los goleadores, a Güiza».

El pasado jueves Juan Arango se equivocó criticando a la afición mallorquinista, y Gregorio Manzano trató de tomar por el camino de en medio y quietarle hierro al asunto. «Arango tuvo una reacción fantástica en el campo marcando dos goles. Sobre las declaraciones, cuando pase el tiempo los aficionados se darán cuenta de que es el segundo máximo goleador de la historia del Mallorca y un jugador temido por los rivales. Está claro que tiene sus virtudes y sus defectos. No he hablado con él porque no le doy importancia. Creo que la gente le quiere y hay que quedarse con lo positivo».

Así, Manzano encara el partido de mañana con la esperanza de poder contar con Jonás y sin temor a la reacción de la grada sobre Arango ya que actúan como visitantes. Por su cabeza sólo pasa la fórmula para tratar de superar al Betis. El entrenador mallorquinista considera que el equipo de Cúper «tuvo mala suerte contra el Madrid porque no es normal dar tres palos en un partido» y advirtió que «es un grupo bastante bueno, con jugadores desequilibrantes delante y que seguro que no estará abajo mucho tiempo».