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Un interminable pelotón dio la salida a la primera etapa de la sexta entrega de la Volta Cicloturista Internacional a Mallorca, que se disputa hasta el próximo domingo. La jornada inaugural del evento tuvo el Castell de Bellver de Ciutat como punto de encuentro. Por delante, 12'8 kilómetros y dos cotas de montaña de primer nivel. Las rampas de Puig Major y el Coll de Sóller pusieron a prueba las piernas de un pelotón que contó con miembros de alto nivel. Es el caso del presidente de la Federació de Ciclisme de les Illes Balears, Arturo Sintes, o el pistard profesional Miquel Alzamora. El director de Esports del Ajuntament de Palma, Biel Serra, fue el encargado de cortar la cinta y dar el pistoletazo de salida, poco después de las nueve de la mañana, a una jornada en la que el buen tiempo ha acompañado al gran grupo (más de 200 corredores) en su tránsito por la Serra de Tramuntana. En el Gorg Blau, y tras un merecido avituallamiento, el pelotón se reagrupó para iniciar el descenso hacia Palma, llegando a la meta pasadas las tres de la tarde, tras superar el recorrido de 128'2 kilómetros diseñado por la organización, a cabo un año más de Unisport Consulting, en colaboración con la FCIB. La Volta a Mallorca es puntuable para el Circuito de España de Marchas Cicloturistas y la Challenge Illes Balears de Cicloturismo.

La prueba cuenta con el patrocinio de las consellerias de Turisme y Esports del Govern, el Consell de Mallorca, Air Europa, Sa Nostra, el IME y los ayuntamientos de Palma, Llucmajor y Calvià. Hoy, el Hotel Playa de Muro será epicentro de una interesante segunda etapa.