TW
0
Assumpta Bassa La campeona ya está en casa. Desde su llegada a Son Sant Joan hasta Sant Llorenç, Marga Fullana no se cansó de recibir el calor de la gente, algo que llegó a emocionar a la pentacampeona mundial de mountain bike, a la que se le escapó alguna lágrima de alegría ante los suyos. Después de recuperar el maillot arco iris ocho años después, la ciclista apareció en la terminal ofreciendo pases toreros con la preciada elástica y exhibiendo un oro que sabe a gloria. Un metal que en los Juegos de Pekín quiere repetir. Allí le aguardaban sus padres, sus hermanas, un centenar de vecinos de Sant Llorenç ataviados con una camiseta naranja conmemorativa de la última gesta de la Gacela, y un grupo de autoridades encabezado por el director de Esports del Consell, Antoni Seguí, el alcalde de Sant Llorenç, Mateu Puigrós, y en nombre de la Conselleria de Esports, Jordi Borrell y Jorge Mandado.

Después de ser 'manteada' por sus incondicionales, y tras sufrir un largo retraso a la hora de abandonar el avión y recoger su equipaje, Fullana puso rumbo a Sant Llorenç, donde la fiesta estuvo a la altura de las cincunstancias. Allí, el president del Govern, Francesc Antich, se unió al tributo popular a la corredora. Medio millar de llorencins arroparon a su campeona, que tras pasar por el Consistorio, emprendió rumbo junto a la comitiva hacia la Plaça de l'Esglèsia, donde una pantalla gigante ofreció las mejores imágenes de la medallista olímpica en Sydney.