El Mallorca aguó anoche la presentación del Castellón con un clara victoria que ratifica su buen estado de forma. El equipo balear, que comenzó el encuentro a remolque, supo reaccionar a tiempo y acabó imponiendo su superioridad en todas las facetas del juego (1-3).
Manzano afrontó el partido con la intención de seguir realizando pruebas y alineó un once cargado de novedades que presentó dos caras muy diferentes. El Castellón supo rentabilizarlo y se adelantó muy pronto en el marcador. El argentino Ulloa, uno de los nuevos rostros del proyecto albinegro, aprovechó un error de Iván Ramis en la frontal del área para superar a Moyà y hacerse con el mando del marcador. Los levantinos, que en esa fase estaban mucho más enchufados que su rival, se adelantaron de forma muy merecida.
El Mallorca asumió como pudo el golpe y trató de incorporarse enseguida volcando su juego sobre la portería del ex madridista Carlos Sánchez. Estuvo a punto de conseguirlo, pero el colegiado anuló un gol a Víctor por fuera de juego y lo dejó todo como estaba. Poco después la acción se repetiría, pero esta vez en la portería contraria y con Gari Uranga como artillero.
Los baleares obtuvieron su premio una vez superada la primera media hora de juego gracias a la puntería de Keita y antes de irse al descanso lograron la ansiada ventaja por medio de Mario Suárez, que desvió al fondo de la red un centro envenenado al corazón del área.
Ya en el segundo tiempo, Mansiguió probando cosas y el Mallorca siguió dominando el encuentro hasta que Óscar Trejo lo sentenció definitivamente.
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