Paul Davidson no tomará parte en ninguna subasta. Su oferta está servida y es definitiva: 38 millones de euros a cambio del paquete accionarial que controla la familia Grande. El empresario inglés, cuya propuesta de compra lleva varios días en poder de los administradores concursales, aseguró ayer que «lo mejor para el club es que el tema de la venta se solucione cuanto antes. Esta situación no es buena para nadie. Mi propuesta está ahí y es inamovible. No voy a subirla».
Davidson, que tiene previsto presenciar el partido ante Osasuna en Son Moix, descartó de esta manera la posibilidad de incrementar su oferta, notablemente inferior a la que planea suscribir el multimillonario austriaco Dietrich Mateschitz.
Los asesores del propietario de Red Bull tienen previsto reunirse a principios de la próxima semana con los tres administradores concursales y oficializar una propuesta espectacular: 50 millones.
En este escenario, es evidente que Mateschitz ha adquirido ventaja en la carrera por adquirir el Real Mallorca, si bien la actual propiedad no descarta que en los próximos días se formalice otra oferta muy importante.
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