Los Emiratos Àrabes se disponen a convertirse en la capital del planeta tenis a partir del lunes y hasta el próximo domingo, pero el torneo de Dubai se ha cargado de incógnitas en sus horas previas. La baja confirmada del suizo Roger Federer, la seria duda de Rafael Nadal y la polémica suscitada por la negativa a conceder los visados a tenistas israelíes está marcando la cuenta atrás del evento.
Nadal tiene previsto decidir hoy su participación en Dubai tras las molestias que le sobrevinieron en Rotterdam. El número uno del mundo restó importancia al malestar que sintió durante la final ante Andy Murray y achacó sus problemas a la fatiga. No obstante, la cargada agenda que se avecina invita a la prudencia y la proximidad de la primera eliminatoria de la Copa Davis sobre tierra podría alterar los planes del tenista mallorquín.
La posible ausencia de Nadal es otro dolor de cabeza para los organizadores del torneo árabe, que ya conocen la baja segura del 'anfitrión' Federer, que tiene casa en Dubai y siente el torneo como propio. Sin embargo, el cartel de participantes es una preocupación relativa teniendo en cuenta la maraña política en la que se ha instalado la cita.
El veto al visado de la jugadora israelí Sahar Peer para tomar parte del torneo WTA que se celebra estos días en Dubai puede vivir un segundo episodio en el caso de su compatriota Andy Ram, que está pendiente de la conformidad de su visado para jugar a partir del lunes. El conflicto entre Israel y Palestina fue el argumento para negar la entrada al país árabe de Peer y el veto ha supuesto la retirada del principal patrocinador del torneo femenino y la negativa de Tennis Channel a retransmitir los partidos del fin de semana.
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