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Miquel Alzamora La confección del nuevo consejo de administración del Real Mallorca debe dar paso obligatoriamente a los fichajes. De cuatro a cinco refuerzos deben llegar en las próximas horas. De hecho el nuevo consejero delegado, Martí Asensio, no quiere perder un minuto y trabajará cada día codo con codo con su director deportivo, Fernando Pons. Su objetivo esta campaña pasa por mantener la categoría y disfrutar de una año «tranquilo». «Esperemos pasar un año más tranquilo que el pasado. Pensamos que el equipo puede estar situado de mitad de tabla hacia arriba. Éste pienso que es un objetivo real para este primer año. Hay una gran plantilla, un buen cuerpo técnico y un vestuario muy unido», comentó el máximo responsable del club de Son Moix.

Sin embargo, Martí Asensio se mostró ambicioso de cara ya a su segundo año de mandato. «Debemos trabajar para estabilizar al equipo y de cara al año que viene hay que pensar en tener un grupo potente, me gustaría llegar a la UEFA y por qué no a la Champions. Pienso que en poco tiempo podemos disfrutar de volver a Europa», comentó.

El consejero delegado no quiso entrar en detalles respecto a los nombres que está barajando el club desde la secretaría técnica «para no subir el precio» y añadió que «las incorporaciones vendrán en las próximas horas, dentro de 1 día, 2, 3 ó 4. Estamos negociando y en breven vendrán nuevos futbolistas», precisó.

De momento, entre una operación de venta y otra, el Mallorca es el único equipo de Primera División que no ha firmado ningún jugador y esto que faltan dos semanas para el inicio de la Liga. Gregorio Manzano lleva ya tiempo esperando los nuevos refuerzos, prácticamente desde Kössen y todavía no ha llegado nada. La situación económica, unida a las dificultades para negociar sin tener disponibilidad económica, hacen muy difícil que se puedan producir incorporaciones. El club intenta apurar primeras opciones como las de Jurado, Borja Valero, David Prieto o Camuñas, pero en todos los casos la economía de guerra en la que ha entrado la entidad frenan que puedan llegar a buen puerto los tratados de intenciones que ha exhibido la entidad durante estas últimas semanas. Primero por esperar a Carlos González y después para definir la llegada de Martí Mingarro, la planificación deportiva se ha retrasado hasta la segunda quincena del mes de agosto.