El lanzador de peso isleño revalorizó la progresión mostrada durante este invierno (llegaba a la cita con 17,86) y en su tercer intento se fue hasta los 18,71 metros, que le dieron el bronce y que es, a la vez, el nuevo récord de Balears en sala (mejorando sus 18,59 que hizo en Valencia en febrero del año 2018). Tras cuatro medallas absolutas al aire libre en su palmarés, el pupilo de José Juan Vellibre se consolida entre los mejores del país dentro de esta especialidad.
Por su parte, la olímpica Caridad Jerez repitió su medalla de plata de 2020 en los 60 metros vallas. A pesar de mejorar su marca del año en las semifinales, de 8.33 a 8.19, la atleta palmesana del Fútbol Club Barcelona fue víctima del buen estado de forma de la joven Xenia Benach: ambas registraron untiempo de 8.20 en una final vibrante, aunque por cuatro milésimas, la mallorquina se quedó con la plata, aunque ya poseía la mínima para el Europeo de la especialidad.
Este domingo, la mallorquina Daniela García (Playas de Castellón), reciente campeona nacional Sub23, intentará extender su dominio a la categoría absoluta en la final de los 800 metros femeninos.
Una distancia en cuyas semifinales, la representación balear fue protagonista. Por un lado, García se impuso en su serie, con una marca de 2:09.09, certificando su presencia en la gran final. De la misma manera que Natalia Romero (Unicaja Jaén Paraíso Interior), que fue la mejor en la segunda serie semifinal, con un tiempo de 2:09.94, que augura un espectacular pulso por el cetro nacional de la distancia entre las dos atletas representantes de Balears.
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