Los jugadores del Mallorca Palma Futsal celebran su clasificación para la Final Four de la Champions tras superar al Piast Gliwice en la segunda jornada de la Ronda Élite en el Palau d'Esports de Son Moix. | Pere Bota

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El Mallorca Palma Futsal no se cansa de hacer historia. El conjunto de Ciutat rubricaba este jueves una de las victorias más especiales de toda su vida y en su primer desfile por la pasarela continental certificaba la clasificación para la Final Four de la Champions League que se disputará durante la primavera de 2023. El equipo dirigido por Antonio Vadillo, intratable e infinitamente superior de principio, goleaba al Piast Gliwice polaco y celebraba junto a la afición de Son Moix un triunfo tan grande como inolvidable (5-0).

Más que un partido, el Palma Futsal-Piast Gliwice era un monólogo. Un encuentro de dirección única que los baleares amarraban desde el minuto uno para evitar sorpresas y ahorrarse sobresaltos. Con el depósito de la confianza hasta arriba, los de verde pistacho arrinconaban muy pronto a la escuadra polaca y se ponían frente a los fogones para cocinar una 'manita' que empezaría a cobrar forma tras solo cinco minutos de acción. Chaguinha sacaba desde la esquina y Mario Rivillos y fusilaba la puerta visitante para indicar el camino.

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El Palma había encontrado enseguida la manera de hacerle daño al conjunto polaco y lo aprovechó para ensanchar la brecha. Como en el primer gol, iba ser Rivillos el que le pusiera la firma al tanto, que llegaba también a balón parado. Ocho minutos había tardado el grupo de Vadillo en romper la baraja y noquear a un Piast del que no había noticias. Tampoco las habría de ahí hasta el descanso, en el que los polacos solo volverían a sacar el balón del fondo de sus propias redes. Dani Saldise no perdonaba en el tercer rechace de otro saque de esquina y bajaba la persiana.

En la segunda mitad tampoco iba a reaccionar el Piast Gliwice, que llegaba a esta segunda jornada con las mismas opciones que el Palma de meterse entre los cuatro mejores equipos de Europa. Pero el conjunto polaco era incapaz de fabricar una sola acción de peligro y todas sus acciones de ataque quedaban desactivadas por la firmeza defensiva del Palma. Solo faltaba que avanzara el reloj.

Ya en los últimos diez minutos, el Palma liquidaba del todo en el marcador un duelo que nunca existió. Mancuso primero y Eloy Rojas después completaban la fiesta verde en un Palau que invertiría los últimos minutos en disfrutar por completo dela fiesta. A falta de una jornada para que acabe la Ronda Élite, el Mallorca Palma Futsal ya es uno de los cuatro mejores clubes de Europa.