En sus guantes reposa una porción notable del extraordinario rendimiento del Mallorca, en posiciones de Champions League y con los mejores números de su historia -igualando a la etapa más lustrosa de Héctor Cúper- en el baúl de la tenporada. Dudú Aouate (Haifa, 1977) aparece cuando el duelo se encuentra en plena ebullición. Es, junto a Toño, el portero de la Liga con más paradas (24), más intervenciones (36) y ha transformado Son Moix en una fortaleza. De hecho, solo ha encajado un gol en casa en los últimos ¡seis meses! y el pasado domingo volvió a acaparar todos los focos con su actuación ante el Valencia. Con contrato en vigor hasta final del presente curso, su renovación es uno de los asuntos pendientes de la dirección deportiva.
El mes que viene cumple 35 años, pero contagia la ilusión de un recién llegado. Ya forma parte de la galería de mitos del mallorquinismo bajo los palos. A la altura de Zaki Badou y Carlos Roa. Contagia su carisma en el vestuario y no se inmuta ni siquiera cuando tiene delante una zaga totalmente reformada, como sucedió el pasado domingo.
Un dato que demuestra su fuerte personalidad afecta a... su jersey. Ante el Valencia, le dieron a elegir entre cuatro colores y escogió el amarillo. Aunque Joaquín Caparrós no es muy partidario de ese color, que los supersticiosos no quieren ni ver, Aouate ya le ha manifestado su intención de seguir con esa camiseta. Le dio suerte frente al conjunto ché y no piensa cambiar.
Aouate llegó a la Isla en el mercado de invierno de la temporada 2008-09, tras la grave lesión sufrida por el binissalemer Miquel Angel Moyà. Con el Mallorca en plena convulsión institucional tras la marcha de Vicenç Grande y con el equipo deambulando por las cloacas de la clasificación, su nombre apareció sobre la mesa. Joaquín García, el presidente puente entre el propietario de Drac y Mateo Alemany, apenas tuvo tiempo para nada... salvo para cerrar la contratación de Aouate, zanjado unos días antes de que la LFP prohibiera al club balear realizar fichajes por la deuda con el Athletic por Aduriz.
El 11 de enero de 2009, en Son Moix ante el Real Madrid, se estrenó con la camiseta bermellona... con el peor desenlace posible (0-3). A la semana siguiente, otra derrota en El Madrigal de Villarreal (2-0) que cerraba una primera vuelta sonrojante con apenas 14 puntos... El Mallorca abrió la segunda vuelta con un convincente triunfo ante el Valencia que alteró el destino. Comenzaba a escribir una historia de sobra conocida y que comienza a ser leyenda.
En noviembre de 2011, ingresó en el selecto club de los porteros que han disputado 100 partidos con el Mallorca en la máxima categoría. Aunque la Premier League llamó a su puerta, Dudú Aouate optó por mantener su fidelidad al conjunto isleño. Y en este inicio de temporada, su rendimiento está impulsando al grupo con unas actuaciones sobresalientes...
2 comentarios
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Si hay un color asociado a la mala suerte es el amarillo y la primera vez que me presenté al trabajo con una lucida camisa amarilla, en mis años mozos, mi jefe me lo hizo saber, que el amarillo era un color maldito en la gama de colores.Yo no lo sabía.Todo viene del mundillo del teatro donde se decía que el color amarillo da mala suerte porque Molière murió representando su obra vestido de este color...y el mal fario todavía perdura.Toquemos madera.
Ya escribimos ayer que Roa fue el héroe de aquella final de Copa en Mestalla contra el Barça, parando tres penaltis, de la época Cúper.Como escribiera ayer en Ultima Hora, el veterano Miguel Vidal (Consell 1942), en MINUTO 91, "...y Aouate de portero" remedando y recordando "...y Roa de portero".Es uno de los grandes aciertos de este Mallorca,tener bajo los palos al israelí, que recibe la protección de su Dios Yahvé, parece ser, siempre en gracia divina, salvo en alguna puntual excepción...como Víctor Valdés (VV) en el Barça.Miguel Vidal (sabe más el diablo por viejo que por diablo)hace el parangón entre Cúper y Caparrós,que son RESULTADISTAS...es decir que buscan el resultado...sin ninguna exquisitez técnica.