PALMA REAL MALLORCA - LUGO FOTO MIQUEL A. CAÑELLAS

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Lejos de engancharse al vagón del ascenso, el Mallorca está a punto de descarrilar de su objetivo tras firmar una temporada que no entraba ni en los cálculos más pesimistas. La Ponferradina destapó anteayer en El Toralín las múltiples carencias de un equipo que afronta el tramo final del campeonato mirando al abismo. Descosido, roto, sin actitud y desestructurado, la trayectoria del conjunto isleño invita a pensar más en amarrar la salvación que en aspirar a una plaza de playoff que comienza a divisar ya con la ayuda de prismáticos: 6 más el golaverage en contra. La decepción va en aumento. Las dos salidas consecutivas (Lugo y Ponferradina) se han saldado con dos derrotas que dejan a la escuadra isleña tocada y casi hundida.

14 EN LA SEGUNDA VUELTA

Un promedio de puntos para luchar por la salvación

El Mallorca va de mal en peor. Si firmó una primera vuelta deficiente, los números que acumula tras cruzar el ecuador del campeonato son sonrojantes. Más propios de un conjunto que lucha por la salvación que del equipo con el mayor presupuesto de la categoría. Después de completar 13 jornadas, la escuadra isleña suma 14 puntos, los mismos que por ejemplo el Girona que es penúltimo y sólo uno más que el colista Alavés. En relación a la primera vuelta, ha sumado 4 puntos menos que los 18 capturados por el Mallorca de Oltra en los trece primeros capítulos de la competición. Y todos los rivales directos se han distanciado. Deportivo y Tenerife suman 10 puntos más, Eibar y Las Palmas 9 y el Murcia 8. Los mejores equipos de la segunda vuelta son Barcelona B, Tenerife y Deportivo (24), mientras que los peores Numancia, Alavés, Ponferradina (13), Jaén y Zaragoza (12).

UN 38% DEL BOTÍN

Lluís Carreras empeora los numeros de José Luis Oltra

El cambio en el banquillo no se está traduciendo, de momento, en resultados. Más bien todo lo contrario. El Mallorca de José Luis Oltra obtuvo un 44'4% de los puntos en juego, mientras que el de Lluís Carreras apenas presenta un 38% (8 de 21 posibles) con la particularidad de que tres de esos puntos fueron obtenidos en los instantes finales gracias a dos penaltis detenidos por Miño. El porcentaje es deficiente y deja al Mallorca abajo.

OBJETIVO: SALVACIÓN

El equipo se autoexige llegar al menos hasta los 52 puntos

El rumbo que está tomando el Mallorca ha encendido las alarmas en el seno de la entidad balear, que ve cómo el peligro del descenso se acerca. Es por ello que antes de hablar de cualquier objetivo, en la plantilla se autoexigen superar la cota 50 -actualmente suma 44- para espantar todos los fantasmas. Y es que en las últimas temporadas ningún equipo ha logrado descender a Segunda División B con 52 puntos, la cifra que se ha fijado en mente el vestuario bermellón para no pasar agobios clasificatorios.

CALENDARIO

Recibe en casa a los tres primeros; visita a los colistas

Quedan ocho capítulos para cerrar el libro de la temporada. Ocho jornadas que decidirán el destino del Mallorca. El grupo balear disputará cuatro como local y otras tantas a domicilio. Se da la curiosa circunstancia que en Son Moix recibirá a los tres equipos que actualmente ocupan las primeras plazas en la Segunda División: Deportivo, Eibar y Las Palmas. Además, el Real Jaén medirá a un grupo agrietado por los resultados.

A domicilio, donde ha doblado la rodilla en sus dos últimas salidas, la escuadra de Lluís Carreras rendirá visita a dos equipos situados en los suburbios de la clasificación, como el colista Alavés -la próxima salida- o el penúltimo Girona, que ha reaccionado en las últimas semanas. También se las verá con Numancia y Córdoba -allí bajará la barrera del campeonato- dos enemigos situados en la zona media de la clasificación.