Imagen de Nadal durante la revisión a la que se sometió ayer en Barcelona.

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La recuperación de Rafael Nadal arrancó ayer en Barcelona, donde el mallorquín pasó por las manos de su médico, Ángel Ruiz-Cotorro, para iniciar el tratamiento al que debe someterse para combatir el síndrome de Hoffa que le ha obligado a abrir un paréntesis en la competición. La dolencia que arrastra en la rodilla izquierda -una inflamación de la grasa ubicada detrás del tendón rotuliano- necesita tratamiento específico y ayer dio comienzo en la Clínica Mapfre de la ciudad condal.

El mallorquín ya había detenido sus entrenamientos en los días previos para visitar al doctor del equipo español de la Copa Davis, pero el tratamiento recibido, que hasta ahora se basaba en fisioterapia, kinesioterapia, iontoferesis y termoterapia, también le obliga a un período de reposo. «No es un problema grave, pero sí molesto y doloroso», explicó en su momento Ángel Ruiz-Cotorro, que seguirá la evolución de la articulación del manacorí en permanente contacto con el fisioterapeuta Rafael Maymó.

La renuncia al US Open concede margen de maniobra en la preparación del mallorquín, que ya ha hecho especial hincapié en que solo volverá cuando su rodilla lo dictamine. No hay prisas, aunque Nadal sí tiene la ilusión de poder volver en la Copa Davis el 14 de septiembre.

En lo que hace referencia a la clasificación mundial de tenis publicada ayer por la ATP, cabe destacar que Roger Federer, se mantiene al frente y logra poner tierra de por medio respecto a su más inmediato perseguidor, Novak Djokovic, después de doblegarle en la final de Cincinnati. Federer acumula 12.165 puntos, casi 900 más que el tenista serbio, y tiene todo de cara para salir número uno del US Open, ya que Nole defiende los 2.000 puntos campeón. Por su parte, Rafael Nadal sigue en la tercera plaza de la tabla con 8.715 y Andy Murray se colocará en disposición de superarle en el US Open, aunque el escocés tendrá que alcanzar como mínimo la final para desbancar al mallorquín del podio.